AFP
El bitcoin superó el jueves la barrera de los 100.000 dólares, impulsado por la elección como presidente de Estados Unidos de Donald Trump, muy favorable al sector de las criptomonedas.
Esta marca simbólica y sin precedentes para la estrella de las monedas digitales parecía totalmente improbable hace 16 años, en el momento de su creación.
La cifra da un poco más de credibilidad a este sector controvertido, que ve con muy buenos ojos el regreso del republicano a la Casa Blanca, especialmente con Elon Musk a su lado.
Tras calificar las criptomonedas de estafa en su primer mandato (2017-2021), Trump cambió de tono durante su campaña, financiada en parte por grupos del sector.
Ahora asegura que hará de Estados Unidos “la capital mundial del bitcóin y de las criptomonedas”.
Como consecuencia, el bitcóin, que valía poco más de 69.000 dólares por unidad el 5 de noviembre, el día de las elecciones estadounidenses, alcanzó el jueves 103.800,44, antes de situarse en poco menos de 103.000 dólares en la cotización en Asia.
La revalorización es de alrededor del 50% desde la victoria del magnate y de más del 130% desde comienzos de este año.
El empujón final fue el anuncio de Trump el miércoles del futuro nombramiento del abogado republicano Paul Atkins, favorable al desarrollo de las criptomonedas, para dirigir la Comisión de Bolsa y Valores, la autoridad reguladora de los mercados financieros, conocida como SEC.
El año pasado, Atkins criticó públicamente a los responsables de la SEC por no haber sido más versátiles ante las empresas del sector de las criptomonedas y los acusó de alejar a los emprendedores del mercado estadounidense.
“Paul es un líder probado en regulaciones de sentido común (…) Reconoce que los activos digitales y otras innovaciones son cruciales para hacer Estados Unidos todavía más grande de lo que nunca ha sido”, dijo Trump en su plataforma Truth Social.
– Creación de un ministerio –
El futuro nombramiento de Atkins “ha encendido a la comunidad cripto, reforzando el optimismo de los inversores en un paisaje reglamentario más complaciente” y “un acercamiento indulgente hacia el mercado en pleno auge de los activos digitales”, resume Stephen Innes, analista de SPI Asset Management.
La reciente renuncia del hasta ahora presidente de la SEC, Gary Gensler, bestia negra del sector, ya había impulsado el precio de las divisas digitales.
Además, la información de que Trump podría crear un ministerio de criptomonedas o una reserva estratégica de bitcoines en Estados Unidos también alimentan el optimismo.
Muchas empresas relacionadas con las criptomonedas vieron cómo sus precios se disparaban después de las elecciones estadounidenses, como el proveedor de servicios de bitcóin MicroStrategy o la plataforma de intercambio Coinbase.
El dogecóin, una criptomoneda creada originalmente como una broma y que Elon Musk promociona desde 2019, también ha estado subiendo.
“¡Wow!”, publicó Musk en su red X tras la noticia de que el bitcóin había superado los 100.000 dólares.
En septiembre de 2021, El Salvador fue el primer país del mundo en adoptar el bitcóin como una de sus monedas legales, pero la criptomoneda no ha convencido a la población.
El bitcóin nació en 2008 del sueño de escapar del control de las instituciones financieras.
Para conseguirlo, su misterioso creador, conocido sólo con el seudónimo de Satoshi Nakamoto, usó una tecnología llamada ‘blockchain’ que registra las transacciones de forma descentralizada e infalsificable gracias a una red de ordenadores repartidos por todo el mundo.
Aunque la operación fue un éxito, el bitcóin, como las otras criptomonedas, estuvo envuelto en numerosos escándalos financieros. También se le acusa de ser utilizado para blanquear dinero y es la moneda preferida de los piratas informáticos.