Cinco momentos inolvidables de la gala de los Óscar antes de la bofetada

AFP

Ante un público atónito, Littlefeather contó que Brando “lamentablemente no podía aceptar este generoso premio” en protesta por el trato que la industria del cine daba a los nativos estadounidenses.

Sus palabras levantaron aplausos, vítores y algunos abucheos entre el público.

– ¡Empatadas! –

En la historia de los Óscar ha habido varios empates, aunque uno de los más destacados ocurrió en 1969, cuando Barbra Streisand y Katharine Hepburn ganaron ambas el premio a mejor actriz.

“El ganador es… ¡es un empate!”, exclamó Ingrid Bergman, quien presentó el galardón.

Streisand conquistó así su primer Óscar gracias a su interpretación de Fanny Brice en “Funny Girl”, mientras Hepburn -que con cuatro estatuillas tiene el récord entre todos los actores- triunfó con “El león en invierno”.

Solo Streisand acudió, sin embargo, a la ceremonia.

“Hola, preciosa”, le dijo a la famosa estatuilla dorada cuando al fin fue suya.

– Demasiada pasión –

Los actores suelen estar muy emocionados cuando logran entrar en el selecto club de ganadores de un Óscar, pero Adrien Brody llevó esa pasión demasiado lejos en 2003. 

Al subir al escenario para recoger su premio a mejor actor por la desgarradora “El pianista” de manos de la vencedora el año anterior, Halle Berry, Brody sorprendió al público -y a la propia Berry- plantándole un breve y apasionado beso en los labios.

“No estaba planeado. No sabía nada”, contó después Berry en una entrevista de 2017, explicando que la agarró desprevenida.

Y confirmó que, sencillamente, ella le “siguió”.

De su lado, Brody explicó en 2015 que “el tiempo se ralentizó” para él en aquel momento, y que su arrebato casi le cuesta la oportunidad de dar su discurso.

“Cuando terminé de besarla… Ya estaban mostrando el mensaje que decía ‘Sal del escenario, tu tiempo se ha acabado’”, recordó en una entrevista durante el festival de cine de Toronto.

– Se repitió la historia – 

Hace sesenta años, la puertorriqueña Rita Moreno ganó el Óscar a la mejor actriz de reparto por su interpretación de la aguerrida Anita en la versión original de “Amor sin barreras” (“West Side Story”). Este domingo, Ariana DeBose hizo historia al conquistar la estatuilla por el mismo papel. 

“¡No puedo creerlo! Señor. Los dejo con eso”, exclamó Moreno en su brevísimo discurso al recibir el premio de manos de Rock Hudson

Ante un público atónito, Littlefeather contó que Brando “lamentablemente no podía aceptar este generoso premio” en protesta por el trato que la industria del cine daba a los nativos estadounidenses.

Sus palabras levantaron aplausos, vítores y algunos abucheos entre el público.

– ¡Empatadas! –

En la historia de los Óscar ha habido varios empates, aunque uno de los más destacados ocurrió en 1969, cuando Barbra Streisand y Katharine Hepburn ganaron ambas el premio a mejor actriz.

“El ganador es… ¡es un empate!”, exclamó Ingrid Bergman, quien presentó el galardón.

Streisand conquistó así su primer Óscar gracias a su interpretación de Fanny Brice en “Funny Girl”, mientras Hepburn -que con cuatro estatuillas tiene el récord entre todos los actores- triunfó con “El león en invierno”.

Solo Streisand acudió, sin embargo, a la ceremonia.

“Hola, preciosa”, le dijo a la famosa estatuilla dorada cuando al fin fue suya.

– Demasiada pasión –

Los actores suelen estar muy emocionados cuando logran entrar en el selecto club de ganadores de un Óscar, pero Adrien Brody llevó esa pasión demasiado lejos en 2003. 

Al subir al escenario para recoger su premio a mejor actor por la desgarradora “El pianista” de manos de la vencedora el año anterior, Halle Berry, Brody sorprendió al público -y a la propia Berry- plantándole un breve y apasionado beso en los labios.

“No estaba planeado. No sabía nada”, contó después Berry en una entrevista de 2017, explicando que la agarró desprevenida.

Y confirmó que, sencillamente, ella le “siguió”.

De su lado, Brody explicó en 2015 que “el tiempo se ralentizó” para él en aquel momento, y que su arrebato casi le cuesta la oportunidad de dar su discurso.

“Cuando terminé de besarla… Ya estaban mostrando el mensaje que decía ‘Sal del escenario, tu tiempo se ha acabado’”, recordó en una entrevista durante el festival de cine de Toronto.

– Se repitió la historia – 

Hace sesenta años, la puertorriqueña Rita Moreno ganó el Óscar a la mejor actriz de reparto por su interpretación de la aguerrida Anita en la versión original de “Amor sin barreras” (“West Side Story”). Este domingo, Ariana DeBose hizo historia al conquistar la estatuilla por el mismo papel. 

“¡No puedo creerlo! Señor. Los dejo con eso”, exclamó Moreno en su brevísimo discurso al recibir el premio de manos de Rock Hudson en 1962.

Ese Óscar, el primero para una mujer latina, fue el primer paso de Moreno en su camino al estatus EGOT, que implica conquistar un Emmy, un Grammy, un Óscar y un Tony. Es un club pequeño, con sólo 16 personas que alcanzaron este codiciado altar.

DeBose era la favorita para conquistar el premio de la Academia por su interpretación de Anita en la nueva versión de Steven Spielberg, y lo consiguió.

“Tu Anita allanó el camino para muchas Anitas como yo”, le dijo a Moreno DeBose, quien celebró su victoria como “una mujer de color abiertamente queer y afrolatina”

en 1962.

Ese Óscar, el primero para una mujer latina, fue el primer paso de Moreno en su camino al estatus EGOT, que implica conquistar un Emmy, un Grammy, un Óscar y un Tony. Es un club pequeño, con sólo 16 personas que alcanzaron este codiciado altar.

DeBose era la favorita para conquistar el premio de la Academia por su interpretación de Anita en la nueva versión de Steven Spielberg, y lo consiguió.

“Tu Anita allanó el camino para muchas Anitas como yo”, le dijo a Moreno DeBose, quien celebró su victoria como “una mujer de color abiertamente queer y afrolatina”.