Msn.
La artista estadounidense Katy Perry dio el pasado fin de semana su último espectáculo a días de convertirse en mamá, con un miniconcierto en el escenario principal de la inédita edición digital del legendario festival de música electrónica Tomorrowland.
Enfundada en un vestido minifalda naranja de lunares blancos, que hacía fuego con la peluca color fuego con la que había decidido responder al pedido de excluir materiales reflectivos o brillantes, una muy embarazada Perry llegó del cielo en un globo con la forma de la cara de un payaso triste.
Con esa entrada, que una vez más demostró que nadie empieza una presentación mejor que Perry, la artista ofreció dos canciones de su nuevo disco Smile , que sale al mercado el 14 de agosto.
La artista comenzó justamente con el primer sencillo de su nueva producción, que también lleva el nombre de “Smile”.
El segundo sencillo del disco, de nombre “Daisies”, fue la segunda canción nueva de Perry, quien escogió Tomorrowland para estrenar sus dos temas ante el público, aunque fuera de forma digital.
Los estrenos fueron los signos de puntuación en el espectáculo de la artista, quien completó su participación con un popurrí de sus grandes éxitos, como Teenage dream y California Girls , con nuevos arreglos al ritmo dance, preferido por los amantes de la música electrónica.
Antes de terminar con su icónicas canciones Roar y Firework , Perry bailó acompañada de sus músicos, vestidos con enterizos pegados naranja y morados y con unos grandes sombreros rojos que les cubrían medio cuerpo, “una excusa para tapar las máscaras”, reconoció la artista en una rueda de prensa dos días antes.