Casi una semana después de que el huracán Melissa tocara tierra en Jamaica como uno de los más poderosos registrados en la historia del Caribe, el país sigue enfrentando las secuelas de una catástrofe que dejó al menos 32 muertos y miles de damnificados. Las autoridades reconocen que el balance podría aumentar en las próximas horas, mientras continúan las labores de rescate y distribución de ayuda humanitaria.
El ciclón, catalogado como categoría 5 en la escala Saffir-Simpson, azotó la isla con vientos de hasta 300 kilómetros por hora, destruyendo viviendas, arrancando árboles y dejando comunidades enteras incomunicadas. Según la ministra de Información, Dana Morris Dixon, aún existen “ocho casos no confirmados” de fallecimientos, y las labores de conteo oficial siguen en curso.
En las zonas más golpeadas, como la provincia de Westmoreland, los habitantes claman por apoyo. “Necesitamos toda la ayuda posible: alimentos, agua, artículos de aseo”, expresó Tackeisha Frazer, residente de la zona. A su lado, Millicent Mccurdy, voluntaria en un centro de distribución improvisado, hizo un llamado urgente a la comunidad internacional: “Esta gente está sin hogar, sin ropa, sin alimento ni agua. Necesitan ayuda”.
Las escenas en distintas regiones del país son de devastación y resistencia. Vecinos y voluntarios descargan camiones con víveres, mientras otros intentan reparar techos o limpiar los escombros. En Whitehouse, el mar mantiene su característico tono turquesa, pero el paisaje está marcado por techos arrancados y estructuras colapsadas. “Todas las construcciones de madera desaparecieron, incluso algunas de concreto”, lamentó la comerciante Diana Mullings.
El ministro de Trabajo, Pearnel Charles Junior, informó que al menos 25 comunidades permanecen aisladas, sin acceso por tierra. En algunos casos, la única opción para llevar suministros será mediante helicópteros. Jamaica enfrenta así uno de los mayores desafíos humanitarios de su historia reciente, en un desastre que, según expertos, se vio agravado por los efectos del cambio climático.