Un contingente de personal de diversas instituciones públicas y residentes de comunidades ha comenzado a ejecutar el plan de atención a incendios forestales en el departamento de Morazán. La iniciativa es coordinada por la Mesa Departamental del Manejo del Fuego de la región y tiene como objetivo mitigar el impacto de los incendios en la actual temporada sin lluvias, cuando los siniestros tienden a aumentar.
El plan cuenta con el apoyo de equipos especializados y herramientas proporcionadas por instituciones como el Fondo de Inversión Ambiental de El Salvador (FIAES) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Estas entidades se han comprometido a reforzar los esfuerzos para controlar los incendios y evitar que continúen devastando grandes áreas de terreno. En el período anterior, se registraron 91 incendios que afectaron cerca de 1,500 hectáreas, aunque la cifra fue menor en comparación con años anteriores gracias a una mayor intervención.
Durante la primera etapa del plan, se enfoca en la prevención, pero también se mantiene preparado un equipo para actuar rápidamente en caso de nuevos siniestros. La Mesa Departamental del Manejo del Fuego ha trabajado en la capacitación y equipamiento de las comisiones municipales de 12 distritos, especialmente en el corredor seco, una de las zonas más vulnerables a los incendios forestales. Estas comisiones estarán listas para actuar de manera efectiva ante cualquier eventualidad.
David Sorto, presidente de la mesa, destacó que muchas veces los incendios se deben al descubierto al encender fogatas o actividades silvestres como la caza y la extracción de colmenas. En algunos casos, los incendios han sido intencionales para destruir grandes áreas de terreno. Sorto expresó que la meta es continuar con los esfuerzos para proteger la flora, la fauna y los medios de vida de los habitantes de la región.