La toxoplasmosis es una enfermedad que se produce como consecuencia de una infección por el parásito Toxoplasma gondii, uno de los parásitos más comunes del mundo.
La infección suele contraerse al comer carne contaminada mal cocida, exponerse a heces de gato infectadas o mediante la transmisión de madre a hijo durante el embarazo.
La toxoplasmosis puede provocar síntomas parecidos a los de la influenza en algunos individuos, pero la mayoría de las personas infectadas no presentan signos ni síntomas.
En los bebés nacidos de madres infectadas y las personas con el sistema inmunitario debilitado, la toxoplasmosis puede provocar complicaciones graves.
La Dra. Carmen Mejía, especialista en Ginecología y Obstetricia, nos explica más, en la siguiente cápsula: