AFP
A menos de un mes de fichar por los Brooklyn Nets, el veterano pívot LaMarcus Aldridge anunció este jueves de forma repentina su retiro después de sentir un latido de corazón irregular durante su último juego.
“Mi último partido lo jugué lidiando con un latido irregular. Más tarde esa noche mi ritmo empeoró aún más, lo que realmente me preocupó más”, explicó el jugador, de 35 años, en un mensaje en su cuenta de Twitter.
Aldridge, siete veces All-Star, jugó cinco partidos con el uniforme de los Brooklyn Nets, el último de ellos el 10 de abril ante Los Angeles Lakers, cuando estuvo 23 minutos en cancha y anotó 12 puntos.
“Aunque estoy mejor ahora, lo que sentí con mi corazón aquella noche fue una de las experiencias más aterradoras que he experimentado”, recordó.
“Dicho esto, he tomado la difícil decisión de retirarme de la NBA. Durante 15 temporadas he puesto el básquetbol primero y ahora es momento de poner mi salud y mi familia primero”, afirmó.
Aldridge ya había tenido otros problemas de corazón en el pasado. En 2007, durante su primera temporada en la NBA con los Portland Trail Blazers, fue diagnosticado con el síndrome de Wolff-Parkinson-White, que puede provocar un latido de corazón acelerado, y se perdió el tramo final de la campaña al ser sometido a una intervención menor para corregir el problema.
En 2017, Aldridge volvió a ser baja varios partidos, en aquel entonces con los San Antonio Spurs, tras experimentar una pequeña arritmia cardíaca durante un juego.
– Pelea por su codiciado anillo –
Aldridge, que promedia 19,4 puntos y 8,2 rebotes en su carrera, se desvinculó a finales de marzo de los Spurs para unirse hasta final de temporada a los Nets, donde aspiraba a ganar su primer anillo de campeón junto a las estrellas James Harden, Kevin Durant y Kyrie Irving.
“La organización de los Nets apoya totalmente la decisión de LaMarcus”, dijo su mánager general, Sean Marks, en un comunicado.
“Sabemos que no fue una decisión fácil para él, pero después de consideraciones detalladas y consultas con numerosos expertos médicos, tomó la mejor decisión para él, su familia y su vida después del basquetbol”, recalcó el ejecutivo.
En sus cinco juegos con los Nets, saldados con tres victorias y dos derrotas, Aldridge lució mejor de lo esperado después de un mes de inactividad.
El pívot, de 2,11 metros de altura, promedió 12,8 puntos y 4,8 rebotes y el técnico Steve Nash le dio la confianza de partir desde el quinteto titular, a diferencia de otro veterano, Blake Griffin, también incorporado en las últimas semanas.
Los Nets, uno de los grandes aspirantes al título, aprovechaban el talento ofensivo de Aldridge para suplir las continuas bajas de alguna de sus estrellas.
Otros candidatos al título, como los Lakers o los Miami Heat, también trataron de hacerse con sus servicios una vez que los Spurs lo apartaron del equipo en marzo, en medio de la peor de sus seis temporadas en el texano, en la que promediaba 13,7 puntos y 4,5 rebotes por partido.
Aldridge fue elegido número 2 del Draft de 2006 y jugó nueve temporadas en los Blazers, donde llegó a dos semifinales de la Conferencia Oeste. En 2015 se incorporó a los Spurs, donde jugó unas finales de conferencia en las que cayó ante Golden State Warriors.