AFP
La Argentina de Lionel Messi avanzó otro paso hacia el Mundial de Catar-2022 tras conseguir un empate y dos triunfos en una triple fecha agotadora donde se consolidó como escolta del líder Brasil.
La Albiceleste anotó un empate sin goles con Paraguay en Asunción y dos victorias en el Monumental de Buenos Aires: un contundente 3-0 ante Uruguay y un trabajoso triunfo 1-0 frente a Perú el jueves por la noche.
Sin destellos pero efectiva la selección que conduce Lionel Scaloni, campeona de América, se acercó más al objetivo y sigue invicta en la clasificatoria sudamericana.
La cuenta arroja 25 puntos para Argentina, detrás del líder Brasil con 31.
Entre los siete partidos que le restan -incluido uno suspendido ante Brasil- la próxima fecha en noviembre será una difícil parada porque visitará a un Uruguay herido por la goleada y luego recibirá a Brasil, en un picante superclásico mundial.
– Solidez sin lujos –
El balance de la fecha entusiasma con un equipo motivado y en sintonía, siete puntos más a la cuenta y ningún jugador afuera por sanciones.
Argentina mostró solidez en el funcionamiento colectivo incluso cuando, como ocurrió frente a Perú, Messi parece poco inspirado para aportar su magia.
Scaloni mantuvo la base del equipo que se coronó campeón de América y supo introducir variantes efectivas, como el ingreso de Exequiel Palacios y Joaquín Correa sobre el final del partido ante Perú para inyectar frescura y sumar rodaje.
“El partido siempre estuvo controlado”, fue el balance de Scaloni.
También mostró su versatilidad Rodrigo De Paul, el volante del Atlético de Madrid, presente en todas las jugadas decisivas con sincronización de relojería para crear peligro en excelente asociación con Leandro Paredes y Giovani Lo Celso.
Otro acierto del equipo de Scaloni es el buen desempeño de la defensa.
“Realmente la solidez defensiva nos está dando alegrías. Sabemos que adelante uno o dos goles vamos a meter. Siempre lo decimos: si defendemos bien, vamos a ganar muchos partidos”, afirmó el eficaz arquero Emiliano ‘Dibu’ Martínez.
La exigencia de la triple fecha afloró en el agotamiento físico de la escuadra argentina.
“Jugar una triple fecha es terrible, hoy se notó el cansancio”, admitió el DT.
Sin la gala de buen fútbol que había mostrado el domingo en la goleada ante Uruguay, Argentina se las ingenió para superar a un Perú complicado que le propuso un juego cerrado y defensivo.
El triunfo, aunque trabajoso y sin destellos mostró a un equipo parejo en todas las líneas y aportó un paso vital en la lucha por un boleto a Catar.