Hamilton Barcenas
El pasado 20 de junio marcó el trágico aniversario de un ataque que estremeció al país en 2010, revelando posteriormente ser un “acto de venganza” ejecutado por Carlos Alberto Avendaño Dubón y otros criminales ya condenados. La motivación detrás del violento suceso fue la muerte de un miembro de su pandilla, y su objetivo era cobrar venganza atacando a motoristas y cobradores de la ruta 32, a quienes acusaban de colaborar con “una clica contraria”.
Dos atentados se llevaron a cabo el mismo día, dejando a su paso tragedia y luto. En uno de ellos, incendiaron un microbús con pasajeros a bordo, y en el segundo, liderado por Carlos Avendaño, dispararon hacia una unidad de transporte. Este último ataque resultó en la pérdida de la vida de un hombre y una niña de 11 años, además de dejar heridos a otros dos pasajeros inocentes.
Tras una exhaustiva revisión de las pruebas presentadas ante el Tribunal 5° Contra el Crimen Organizado, el juez emitió un veredicto contundente. Carlos Alberto Avendaño Dubon fue condenado a 80 años de prisión, desglosados en 50 años por los dos homicidios agravados y 30 años por dos homicidios agravados tentados. Cabe destacar que al momento de este juicio, Avendaño ya cumplía condena en La Esperanza por el delito de agrupaciones ilícitas.
La sentencia representa un paso significativo hacia la justicia, brindando un cierre a una década de dolor para las familias de las víctimas y para la sociedad en general. La condena reafirma el compromiso del sistema judicial sobre la búsqueda de la paz y la seguridad para la ciudadanía.