AFP
Con tres Ligas de Campeones en su vitrina y actuaciones de leyenda con Costa Rica, Keylor Navas podría estar disfrutando de una plácida despedida mundialista en Catar salvo que, como tantas veces en su carrera, está obligado a reivindicarse.
El arquero tico, que cumplirá 36 años en diciembre, ha sido relegado a la suplencia por el nuevo entrenador del París SG, Christophe Galtier, que resolvió el pulso en la portería en favor del italiano Gianluigi Donnarumma.
No es una situación extraña para Navas, que ya vivió años de rumores sobre posibles sustitutos en el Real Madrid, aunque fuera el titular en tres triunfos seguidos en la Liga de Campeones.
Su altura, por debajo del 1,90m, y juego de pies levantaron sospechas a su llegada a todos sus equipos europeos, pero Navas acabó siempre convenciendo a base de trabajo, regularidad, reflejos y personalidad.
En paralelo, fue el líder de la mejor generación del fútbol costarricense, acompañado de pilares como Óscar Duarte, Celso Borges, Brian Ruiz y Joel Campbell.
Este grupo hizo de Costa Rica la revelación y ‘matagigantes’ de Brasil-2014, pasando por delante de las campeonas mundiales Inglaterra, Italia y Uruguay en la fase de grupos y cayendo solo en los penales ante Países Bajos.
“Fue un campeonato increíble que nos ayudó a muchos futbolistas a llegar a grandes equipos. Lo disfrutamos muchísimo”, recordó esta semana Navas en declaraciones a Radio Marca.
– “Va a demostrar muchas cosas” –
Cuando ya se la daba por amortizada, la vieja guardia tica dio una última alegría al país clasificando a Catar, su tercer Mundial seguido, rehaciéndose de una desastrosa primera mitad de eliminatorias de Concacaf.
Bajo la guía del recién llegado Luis Fernando Suárez, Costa Rica se apoderó de 19 de los últimos 21 puntos y después selló el boleto en el repechaje contra Nueva Zelanda.
La escuadra centroamericana se apoyó en su fortaleza defensiva y actuaciones estelares de Navas, encajando solo un gol en los últimos seis juegos de eliminatorias.
Pese a la inactividad en París, Suárez tiene la máxima confianza en su capitán para resistir a los embates de los delanteros de España, Alemania y Japón.
“Me hubiera gustado que hubiera jugado, pero le conozco y sé que ha hecho las cosas bien y que se ha preparado bien”, dijo el técnico colombiano a Marca.
“Keylor es un guerrero, un luchador, un ejemplo a seguir para todos sus compañeros. Este Mundial va a ser muy especial para él y además va a querer demostrar muchas cosas”, añadió.
Costa Rica iniciará su camino el miércoles frente a España, un ‘enemigo íntimo’ para Navas, que jugó durante una década en ese país resguardando el arco del Albacete, Levante y Real Madrid.
Enfrente no tendrá esta vez a Sergio Ramos, uno de sus mejores amigos en el equipo blanco y ahora en París, de quien dijo que, ya que Luis Enrique no lo convocó, no le importaría que fuera costarricense para que le acompañara en Catar.
Con mil batallas en la mochila y una fe inquebrantable en sí mismo, Navas no tiene problemas en conceder el favoritismo a España y Alemania pero manda un aviso: “Todos los partidos hay que jugarlos”.