AFP
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reanudó este lunes sus actividades oficiales con su conferencia matutina tras recuperarse del Covid-19, que le fue diagnosticado el 24 de enero.
“¡Buenos días, ánimo!”, expresó López Obrador, vestido con un traje azul oscuro y sin portar mascarilla, al entrar a la sala de conferencias cuando apenas amanecía en el Palacio Nacional, la sede del gobierno.
“Agradecerle a todos los mexicanos, mujeres y hombres, que se preocuparon por mi enfermedad por mi contagio de covid. Afortunadamente salí adelante”, dijo el mandatario de 67 años.
Explicó que atravesó la enfermedad con algunos “dolores de cuerpo” y “poca temperatura” y que aceptó recibir un tratamiento que experimenta el Instituto Nacional de Nutrición, uno de los centros médicos públicos de mayor prestigio.
“Me empezaron a aplicar un medicamento antiviral desde el lunes (25 de enero) y desinflamatorios y afortunadamente dio buenos resultados”, añadió López Obrador, quien es hipertenso y sufrió un infarto en 2013.
Dijo solidarizarse con “quienes han perdido la vida por esta terrible pandemia y a quienes sufren al estar internados mucho tiempo y padecer de daños en el proceso”.
El mandatario, que ha sido criticado por relativizar la efectividad del tapabocas para prevenir los contagios, fue consultado si utilizaría mascarilla, a lo que respondió: “No, no. Además de acuerdo a lo que plantean los médicos ya no contagio”.
Interrogado sobre si planea aplicarse la vacuna anticovid, reiteró que esperará su turno, previsto a partir de marzo cuando se empiece a vacunar a los mayores de 60 años.
El mandatario dijo que no recurrirá a lo que describió como la “argucia” de querer inspirar “confianza”, como hicieron otros gobernantes en el mundo que fueron de los primeros en vacunarse.
México aplica la vacuna desde el 24 de diciembre. Personal médico y maestros del sureste ya fueron inoculados.
La noche del 24 de enero López Obrador anunció que se había contagiado el Covid-19, lo que lo obligó a suspender sus actividades durante dos semanas.
El jueves pasado, en un video subido a las redes sociales, el líder izquierdista informó que ya había dado negativo al Covid-19 en una prueba rápida de antígeno.
México, con 126 millones de habitantes, registraba hasta el domingo 1,9 millones de contagios y 166.200 defunciones.