Los habitantes de la comunidad Nueva Israel, ubicada sobre la avenida Francisco Gavidia en San Salvador, en cada invierno tienen temor de perder sus viviendas debido a que con las lluvias el caudal del río El Arenal incrementa, amenazando constantemente con destruir sus casas, pero ellos aseguran que no dejan sus hogares porque no tienen adónde más ir.
“Es una angustia y un temor de cada uno de los habitantes de la Comunidad Nueva Israel, porque cada año se nos inunda”, afirma Ana Castro, quien habitan en ese lugar, mientras que Victoria Trujillo, quien tiene varios años de vivir en esa comunidad asegura que cada vez que llueve no puede dormir debido al posible riesgo de que su casa “sufra daños”.
Los habitantes también solicitan a las autoridades que estén cerca cuando las lluvias incrementan y que busquen la manera de crear proyectos de mitigación de riesgos, ya que solo en este lugar son más de 400 personas las que habitan entre Niños, adolescentes y adultos mayores .