Luis Gómez
El FC Barcelona sufrió una dura derrota por 3-1 ante el Borussia Dortmund en el Signal Iduna Park, en el que fue su partido más flojo de la temporada. Sin embargo, el marcador global (5-3) tras el 4-0 conseguido en la ida les permitió avanzar a las semifinales de la Liga de Campeones, una instancia que no alcanzaban desde hace seis años.
El conjunto dirigido por Hansi Flick se mostró muy por debajo de su nivel habitual. Con un plantel visiblemente fatigado, cortaron su racha de 24 partidos invictos en 2025, compuesta por 20 triunfos y 4 empates. Pese al revés, nunca vieron peligrar la eliminatoria, gracias a la amplia ventaja obtenida en el partido de ida en el Estadio Olímpico de Montjuic.
Dortmund aprovechó la desconexión del Barça desde el inicio. A los 11 minutos, Serhou Guirassy convirtió de penalti tras una falta sobre Gross, encendiendo las alarmas y trayendo al recuerdo azulgrana las dolorosas eliminaciones vividas en Roma y Liverpool años atrás, cuando también dejaron escapar ventajas importantes.
El Barcelona deberá corregir errores de cara a la próxima ronda, donde enfrentará a un rival aún por definirse. Aunque la derrota deja dudas, el pase a semifinales supone un respiro para un club que llevaba años sin figurar entre los cuatro mejores del continente.