AFP
La misión de observación electoral de la OEA cuestionó este martes el “lento” recuento de los votos de los comicios presidenciales y legislativos que se desarrollaron con “tranquilidad” el domingo en El Salvador y de los que el mandatario Nayib Bukele se autoproclamó reelecto.
Al cierre de las urnas, la misión “observó un inicio lento de los procesos de conteo y escrutinio” en las mesas de votación, consignó un informe preliminar del ente hemisférico.
La misión destacó que pudo ver “una etapa de procesamiento y transmisión de datos extremadamente lenta”, debido a que “recibieron tardíamente” recursos tecnológicos y equipos de transmisión.
Cuando cerró la jornada electoral (cerca de las 17H00 locales del domingo) “el 48,9% de las Juntas Receptoras de Votos observadas no había recibido el kit tecnológico” que serviría para transmitir los resultados de la votación al Tribunal Supremo Electoral (TSE), subrayó el informe.
Fue después de varias horas de clausuradas las urnas y ante distintas fallas en el sistema informático que, según el reporte, el TSE aprobó “la elaboración manual de actas para el escrutinio preliminar”.
En el escrutinio preliminar del TSE, se procesaron 6.015 actas de un total de 8.562, lo que equivale a un procesamiento del 70,25% de los comicios presidenciales.
La delegación de la Organización de Estados Americanos (OEA) también señaló que observó un “prolongado vacío de información oficial” por parte del TSE luego del cierre de los centros de votación.
Pese a las incidencias con el proceso de recuento, la OEA señaló que “los datos recabados por su equipo de trabajo confirman la amplia diferencia entre el candidato ganador y otros candidatos en la contienda, lo cual no deja duda sobre los resultados electorales de las elecciones presidenciales”.
La noche del domingo, el presidente Bukele, quien goza de una abrumadora popularidad por su “guerra” antipandillas, se autoproclamó reelecto y celebró el triunfo con una masiva concentración en una céntrica plaza de San Salvador.
Previo a los comicios, según el informe, la misión de la OEA observó el desarrollo de una campaña electoral “atípica e inequitativa”, debido a que algunos “actores entrevistados” señalaron que hubo “ausencia” de “condiciones de equidad” para que los aspirantes pudieran “competir de manera justa”.
La misión visitó 1.143 juntas receptoras de votos en 387 centros de votación, en los 14 departamentos del país, así como en Barcelona, España, Guatemala, México y Washington.