AFP
La oenegé Médicos Sin Fronteras (MSF) alertó este lunes sobre el destino “trágico” de miles de niños que viven sin acceso a la salud y sumidos en la violencia en el campamento sirio de Al Hol, donde están detenidos familiares de yihadistas.
En un informe, MSF estimó que la coalición internacional antiyihadista y los países que tienen a ciudadanos detenidos en el noreste de Siria “faltaron a sus obligaciones” y llamó a que se cierre este campamento.
Al Hol “es una enorme prisión a cielo abierto, en la que la mayoría de los detenidos son niños, muchos de ellos nacidos en el campamento, privados de su infancia y condenados a estar expuestos a la violencia y la explotación, con un acceso limitado a la salud y sin esperanza”, se lamentó la responsable de operaciones de MSF en Siria, Martine Flokstra.
Este campamento está administrado por los kurdos y alberga a unas 50,000 personas incluyendo a familiares de supuestos yihadistas, pero también a desplazados sirios e iraquíes.
Los niños constituyen un 64% de la población y la mitad de ellos son menores de 12 años, según la MSF.
“Hemos visto y escuchado historias trágicas”, contó Flokstra.
El informe cita la falta de atención de salud e incidentes de violencia.
Hay muertes “como consecuencia de los prolongados plazos para acceder a servicios médicos urgentes” y hay reportes de “niños separados por la fuerza de sus madres cuando cumplen los 11 años”, señaló Flokstra.
En 2021, 79 menores perdieron la vida en este campamento, estimó MSF.
Entre los detenidos en Al Hol hay más de 10,000 extranjeros, que están albergados en un sitio denominado “El anexo”, que para MSF son responsabilidad de sus países natales que han fallado a la hora de repatriarlos.
“Los esfuerzos para cerrar el campamento han sido insuficientes”, afirmó.