AFP
Más regiones en España implementaron este lunes un paquete de duras medidas ante el repunte de casos de coronavirus, como el cierre de locales nocturnos y restricciones a fumar en las calles, un día después de una primera manifestación en contra de esas decisiones.
Luego de que ocurriera en La Rioja y Murcia el domingo, las nuevas restricciones entraron en vigor este lunes en Andalucía, Castilla y León, Galicia y Cantabria, por lo que ya rigen en 6 de las 17 regiones autónomas del país de 47 millones de habitantes.
Las medidas, que incluyen el cierre de discotecas, hora máxima de apertura en las noches para restaurantes y bares y prohibición de fumar en espacios abiertos si no se puede mantener al menos dos metros de distancia de otras personas, fueron anunciadas el viernes pasado por el ministro de Salud, Salvador Illa.
Pero son las regiones, competentes en materia de salud, las que deben implementarlas y vigilar su cumplimiento.
Las disposiciones, que también limitan a diez personas las reuniones sociales y restringen las visitas a residencias de mayores, fueron repudiadas el domingo en una manifestación en Madrid que congregó a entre 2.500 y 3.000 personas, según un portavoz regional.
Con gritos de “libertad” y pancartas que leían “el virus no existe” o “las mascarillas matan”, las personas se reunieron convocados por las redes sociales en una céntrica plaza de la capital española para denunciar una supuesta exageración de cifras del covid-19 para justificar una restricción de libertades.
Como muchos de los asistentes no usaron mascarillas, obligatorias en el exterior en toda España, el delegado del gobierno en Madrid, José Manuel Franco, anunció a la radio Cadena Ser que “se sancionará con el máximo rigor lo que sucedió”.
Mientras, el gobierno regional del País Vasco declaró la “emergencia sanitaria”, una figura que le permitirá tomar medidas incluso más duras que las anunciadas por las otras regiones, como por ejemplo restricciones locales de movilidad, ante “un posible tsunami” de contagios, según dijo la consejera regional de salud, Nekane Murga.
España es el país de Europa Occidental con más infectados por coronavirus con casi 343.000 y su tasa de contagios fue de 115 casos por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas, muy por encima de los 45 en Francia, 19 en Reino Unido y 16 en Alemania.
De todas maneras, buena parte de los nuevos casos son asintomáticos y la letalidad del virus bajó considerablemente: desde que finalizó el 21 de junio el rígido confinamiento de toda la población por tres meses, se han notificado menos de 300 de los 28.617 decesos que acumula el país durante la pandemia.