Los Juegos de Tokio tendrán espectadores locales con un máximo de 10.000 por sede

AFP

Los Juegos de Tokio contarán con un máximo de 10.000 espectadores en cada sede de la competición, anunció este lunes la organización a apenas un mes de su inicio el 23 de julio, aunque avisa de la posibilidad de celebrarlos a puerta cerrada si aumentan los contagios de covid-19.

En su comunicado, la organización precisa que el límite estará en el 50% de la sede, con un máximo de 10.000 espectadores.

“Si hubiera un cambio pronunciado en la situación epidémica, tendríamos que revisar la norma y considerar la opción de no tener espectadores en las sedes”, señaló la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, antes de que se anunciara la decisión.

La organización añadió en un comunicado que la decisión sobre el número de aficionados en los Juegos Paralímpicos (24 agosto-5 septiembre) es aplazada hasta el 16 de julio.

– Deportistas reacios –

En marzo, había decidido prohibir la llegada de espectadores del extranjero debido a un riesgo sanitario considerado demasiado alto, algo inédito en la historia olímpica. 

Este lunes la organización tenía que decidir sobre celebrarlos a puerta cerrada o con aficionados locales, opción por la que finalmente han optado, aunque en un número restringido.

Un sorteo determinará los aficionados que pueden acudir a los Juegos de entre aquellos que tenían ya su entrada. Los afortunados tendrán que llevar mascarillas todo el tiempo y tendrán prohibido “hablar fuerte o gritar”, precisó la organización.

En la reunión participaron cinco partes: el comité organizador de Tokio-2020, el gobierno japonés, el gobierno de la metrópolis de Tokio, el Comité Olímpico Internacional (COI) y el Comité Paralímpico Internacional (CPI).

El levantamiento del estado de emergencia el domingo en Tokio y otros departamentos transmitió una señal positiva a los organizadores que esperaban la decisión del gobierno japonés para determinar si aceptarían espectadores locales y, de ser así, cuántos.

Pero el gobierno japonés ha mantenido algunas restricciones al menos hasta el 11 de julio y el primer ministro Yoshihide Suga advirtió que podría reforzarlas si los casos de covid-19 aumentan y el sistema sanitario se halla bajo presión.

Los expertos sanitarios que asesoran al gobierno habían avisado que sería “ideal” celebrar los Juegos a puerta cerrada, mientras que algunas asociaciones médicas habían pedido la anulación.

Los deportistas eran los primeros reacios a que los Juegos se celebraran a puerta cerrada y algunos patrocinadores habían reconocido en privado que preferían la presencia de público, aunque sea limitado.

Dirigiéndose a las autoridades japonesas al inicio de la reunión, el presidente del COI Thomas Bach dijo que su organización “apoyaría totalmente la decisión” que busca “proteger mejor” a la población japonesa y a los participantes.

También reiteró que más del 80% de los residentes de la Villa Olímpica serán vacunados, así como casi el 80% de los periodistas.

– Mejoras en las encuestas –

El viernes, en rueda de prensa, la presidenta del comité organizador de Tokio-2020, Seiko Hashimoto, reconoció que resultaba difícil decidir: “Organizar los Juegos sin espectadores es el mejor medio de garantizar los Juegos con total seguridad. Pero mientras tengamos espectadores que deseen asistir a los Juegos, intentaremos en la medida de lo posible satisfacerlos y limitar los riesgos”.

“Si las circunstancias son demasiado desfavorables, nos veremos obligados a renunciar” y esta decisión “se puede tomar hasta el último momento”, dijo.

Los organizadores llevan meses intentando superar la resistencia de la opinión pública japonesa, que en general se ha mostrado hostil a la celebración de los Juegos.

Sin embargo, una encuesta publicada el lunes en el periódico Asahi reveló que el 34% de los japoneses son ahora favorables a los Juegos, frente al 14% del mes pasado.

Según una encuesta publicada este domingo por la agencia Kyodo, el 86% de los interrogados sigue preocupado por un repunte del covid-19 durante los Juegos y el 40% cree que deberían celebrarse sin espectadores.

Japón, que comenzó a cerrar sus fronteras en marzo de 2020, ha vivido la pandemia mucho mejor que otros países, con 14.400 muertes registradas oficialmente.

Pero tardó mucho en lanzar la vacunación y por ahora menos del 7% de los japoneses ha recibido las dos dosis de la vacuna.

Los organizadores de los Juegos Olímpicos dividieron por tres el número de delegados extranjeros invitados e impusieron medidas draconianas a los participantes, con amenazas de expulsión en caso de incumplimiento de las normas sanitarias.