AFP
Las ventajas que llevaba en los tres partidos que ha disputado en 2021 se esfumaron por descuidos en la defensa. El último, la noche del lunes en Rio, privó a Argentina de una victoria contra Chile en su estreno en la Copa América de Brasil.
Sin un respaldo en la zaga no hay esfuerzos de Lionel Messi que valgan para la Albiceleste. El ’10’ ha anotado dos goles en los últimos tres cotejos, ambos en los empates 1-1 contra La Roja, en el premundial sudamericano hace semana y media y en el debut del torneo internacional la víspera.
Pero después de marcar, algún compañero de la última línea erra y a los hombres de Lionel Scaloni, aunque no pierden, les toca consolarse con empates.
“Otra vez el equipo argentino saca ventajas y no sabe sostenerlo, le pesa sostenerlo. Tagliafico comete un penal tan zonzo como el de Otamendi el otro día”, explicó el comentarista Martín Liberman en su canal en YouTube.
En el estreno copero, el lateral izquierdo Nicolás Tagliafico derrumbó torpemente a Arturo Vidal en el área. Aunque Emiliano Martínez atajó el disparo del ‘Rey Arturo’ desde el punto blanco, el rebote halló a Eduardo Vargas sin marca para poner las tablas.
“Fueron dos jugadas puntuales en las que el equipo no estuvo bien. Ellos consiguieron el penal y nada más. A partir de ese momento se nos hizo cuesta arriba”, reconoció Scaloni.
La acción recordó la infracción cometida por Nicolás Otamendi sobre el mediocampista colombiano Mateus Uribe en Barranquilla, el 8 de junio en la octava jornada del clasificatorio sudamericano.
Sin necesidad, el zaguero derrumbó al cafetero y revivió a Colombia, que entonces perdía 2-0 y terminó por igualar en un cabezazo de Miguel Borja, en el último minuto, en un descuido de Juan Foyth en la marca.
Contra La Roja, el 3 de junio en Santiago del Estero, también cedieron una igualdad por una desconcentración de los cuatro de atrás. Tras un cobro de tiro libre, Gary Medel dio un pase de la muerte para Alexis Sánchez, quien solo, debajo del arco, puso la paridad.
– ¿Sueño lejano? –
Con una defensa blanda -comprometida en los cuatro goles que ha encajado Argentina en sus últimos tres encuentros-, el deseo de Messi de alzar la Copa América, que se le ha esfumado tres veces, dos de ellas precisamente contra Chile, en las finales de la Copa América 2015 y 2016, puede transitar por los caminos de la utopía.
“Chile sin hacer mucho se generó un mano a mano, la jugada del penal y se termina llevando un premio exagerado. Nos tiene que servir para lo nuestro: en el momento que va a presionar arriba tiene que estar más compacto atrás. Debe corregir eso si queremos ser los candidatos y llegar a la final”, escribió el entrenador argentino Antonio Mohamed en el diario Olé de Buenos Aires.
“El rival nos pateó dos veces, nosotros ocho y no lo pudimos ganar”, agregó.
El buen funcionamiento de la retaguardia es vital para una Argentina que marca pocos goles. De los tres primeros equipos de la eliminatoria sudamericana, en la que marcha segundo, por detrás de Brasil, es el que menos tantos ha anotado (9 en seis juegos).
“Estaría preocupado si el equipo no generara situaciones de gol. Lo importante es que lo hacemos, metemos muchos jugadores en el área. Ya va a entrar, estamos tranquilos”, afirmó Scaloni tras el debut contra Chile.
La tranquilidad que evoca el entrenador, de 43 años, será puesta a prueba el viernes, cuando la Albiceleste choque con Uruguay en el estadio Mané Garrincha en Brasilia.
Diego Godín y José María Giménez defenderán las embestidas de Messi y compañía. Luis Suárez y Edinson Cavani seguramente exigirán a la maltrecha zaga argentina.