Óscar Flores
El gobierno islandés autorizó la reanudación de la caza de ballenas el viernes bajo estrictas condiciones, tras haberla suspendido más de dos meses a nombre del bienestar animal.
Según el Ministerio de Agricultura y Pesca, la caza de ballenas podrá reanudarse a partir del viernes bajo condiciones rigurosas. Esta decisión ha sido recibida con fuertes críticas por parte de grupos defensores de los derechos de los animales, quienes esperaban el fin definitivo de esta práctica tras la suspensión que fue anunciada a finales de junio.
La organización Human Society International expresó su descontento ante esta medida, calificándola como “devastadora e inexplicable”. A fines de junio, el gobierno había suspendido la caza después de que un informe solicitado por las autoridades concluyera que esta actividad no cumplía con la ley islandesa de bienestar animal.
El único poseedor de una licencia de caza en Islandia deberá acatar las regulaciones impuestas por el gobierno, que incluyen requisitos más estrictos en cuanto a equipos y métodos de caza, además de una supervisión reforzada.
La licencia de pesca de la última empresa de caza de ballenas en Islandia, Hvalur, está programada para expirar en 2023. La empresa ya ha anunciado que esta temporada será la última debido a la disminución de la rentabilidad en la industria pesquera.
Es importante destacar que Islandia es uno de los tres países que aún autorizan la caza de ballenas, junto con Noruega y Japón. Esta decisión plantea debates sobre la ética y sostenibilidad de esta práctica en un contexto global de creciente preocupación por el medio ambiente y los derechos de los animales.