AFP
Dos personas murieron en México por los efectos de Lidia, que golpeó la costa del Pacífico el martes como un poderoso huracán categoría 4 y que este miércoles se degradó a depresión tropical, informaron las autoridades.
Una de las víctimas falleció al intentar cruzar con su camioneta un arroyo desbordado en el municipio de Pihuamo (estado de Jalisco, oeste), dijo este miércoles a la prensa el director regional de Protección Civil, Víctor Hugo Roldán.
Otro hombre murió al caerle encima un árbol cuando conducía un vehículo en la localidad costera de Bahía de Banderas, en medio de fuertes vientos, había reportado el martes el gobierno del vecino estado de Nayarit.
Lidia tocó tierra en Las Peñitas como un huracán categoría 4 de la escala Saffir-Simpson (de 5), con vientos sostenidos de 220 km/h, por lo que fue considerado “extremadamente peligroso”.
El sitio impactado está a 100 km de Puerto Vallarta, uno de los principales destinos turísticos de México, donde se interrumpió “parcialmente” la energía eléctrica y se registraron daños menores, indicó Roldán.
Al avanzar por tierra hacia el norte de México, el ciclón perdió fuerza y la mañana de este miércoles ya era una depresión tropical, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Por sus amplias líneas costeras en el Pacífico y el Atlántico, México es uno de los países más vulnerables a sufrir el embate de los huracanes, con al menos una decena de fenómenos climatológicos al año, todos con potencial de convertirse en ciclones.
En octubre de 2015, el Pacífico mexicano sufrió el impacto de Patricia, el huracán más poderoso en los registros meteorológicos con vientos sostenidos de 325 km/h. Sin embargo, solo dejó daños materiales porque tocó tierra en una zona deshabitada y dominada por una gran cadena montañosa.