Carlos Ernesto A. P., de 25 años, fue arrestado la noche del miércoles de la semana pasada en la colonia San Bartolo Ticsa. El joven es acusado de lesiones y expresiones de violencia en perjuicio de su compañera Yennifer A. R. A., de 23 años.
De acuerdo con la denuncia oficial, la pareja se encontraba consumiendo bebidas alcohólicas cuando una discusión originada por celos se tornó violenta. Carlos expresó palabras denigrantes hacia su pareja y posteriormente la agredió físicamente, causándole lesiones que, según el Instituto de Medicina Legal, requerirían siete días para sanar y resultaron en cinco días de incapacidad laboral.
Según Centros Judiciales, Carlos Ernesto enfrentó acusaciones en el Juzgado de Paz de Ilopango. Durante la audiencia inicial, la víctima revocó la acusación por el delito de lesiones, lo que resultó en un sobreseimiento definitivo por parte de la juzgadora. Sin embargo, debido a las acusaciones de lesiones y expresiones de violencia contra la mujer, ambas partes acordaron la salida alterna de la suspensión condicional del procedimiento, con una duración de un año.
El sujeto, después de admitir su comportamiento, fue sujeto a una serie de estrictas condiciones, las cuales incluyen no cambiar de domicilio, abstenerse de consumir bebidas alcohólicas y drogas, así como no volver a agredir de ninguna manera a su compañera. Además, se le ordenó asistir a terapias psicológicas con el propósito de superar su comportamiento violento y eliminar cualquier indicio de misoginia en su conducta.
Este caso pone de relieve la importancia de abordar de manera integral la violencia de género y el comportamiento misógino, no solo a través de la justicia, sino también a través de medidas que promuevan la concienciación y el cambio en los agresores para prevenir futuros actos violentos.