AFP
La jefa de la oficina legal de Hawái dijo el viernes que abrió una investigación sobre la respuesta de las autoridades a los devastadores incendios forestales que mataron al menos a 67 personas en el estado esta semana.
Las críticas por la reacción oficial ante el desastre son cada vez más fuertes, por lo que la fiscal general de Hawái, Anne Lopez, anunció la apertura de una indagación sobre cómo fue manejada la crisis.
Los residentes se han quejado de que no hubo advertencias sobre el incendio, que dejó atrapada a la gente en la ciudad.
Lopez dijo que emprenderá “una revisión exhaustiva de la toma de decisiones críticas y de las políticas en vigor que condujeron, durante y después, a los incendios forestales en las islas de Maui y Hawái esta semana”.
Habitantes, aturdidos, buscaban el viernes entre los restos ennegrecidos de las casas alguna pertenencia que hubiera sobrevivido a la furia de las llamas en Lahaina, una ciudad de la costa oeste de Maui muy popular entre los turistas.
La cantidad de muertos se elevó en la tarde del viernes a 67, luego de confirmarse otros 12 fallecidos, según el balance oficial.
“No puedo creer que lo consiguieras”, le dijo una mujer a otra mientras se abrazaban entre las ruinas de la que fuera una localidad de 12.000 habitantes.
Algunos fueron más afortunados. “No podía creerlo”, dijo Keith Todd a la AFP tras encontrar su casa intacta. “Estoy muy agradecido, pero al mismo tiempo es tan devastador”.
Los bomberos seguían el viernes extinguiendo los focos y conteniendo incendios aún activos en la localidad, como evidenciaron periodistas de la AFP en un recorrido.
Los equipos de búsqueda se ayudan de perros para rastrear a las víctimas de lo que el gobernador Josh Green dijo que era “probablemente el desastre natural más grande en la historia del estado de Hawái”.