AFP
La rumana Simona Halep, primera cabeza de serie, ganó este lunes el Torneo de Roma, tras el abandono en el segundo set de la final (con 6-0 y 2-1) de la defensora del título, la checa Karolina Pliskova (N.2).
Tras dos finales perdidas en 2017 y 2018, Halep ganó por primera vez en la tierra batida romana, logrando así su tercer título consecutivo tras Dubai y Praga, a menos de una semana del comienzo de Roland Garros, aplazado a septiembre por la pandemia de coronavirus.
Pliskova, en dificultades físicas en el primer set, recibió atención médica en su espalda y abandono “por lesión” al inicio del segundo, señaló la WTA, sin ofrecer más precisiones.
“Es una gran decepción para mí no acabar el partido hoy, pero Simona eres demasiado fuerte, hay que estar al 100% para jugar buenos partidos contra ti, mereces el título”, señaló Pliskova.
“Sé que no querías acabar así, pero has jugado muy bien esta semana. Recupérate y buena suerte para Roland Garros”, le respondió Halep.
Después de que la rumana la barriera en la primera manga, Pliskova parecía mejor en la segunda. Acababa de ganar su primer juego cuando se dirigió a Halep para anunciarle que no podía continuar.
– 14 triunfos consecutivos –
Halep, que había mostrado sus ambiciones en Roma, incluyendo una trabajada victoria en tres sets ante Garbiñe Muguruza en semifinales, asfixió con precisos golpes a Pliskova, que además llevaba una venda en el muslo izquierdo.
Con su triunfo, Halep lleva a 14 su racha de victorias consecutivas. Esta serie había comenzado antes del parón de cinco meses por la pandemia logrando el título en Dubai en febrero. Tras la reanudación volvió a ganar en Praga en agosto y ahora suma Roma.
“Cuando vine aquí la primera vez en 2013 me gustó mucho y tuve la suerte de llegar a semifinales. Desde entonces he jugado bien y después de dos finales he podido ganar el título”, señaló Halep antes de recibir el trofeo.
“Quiero agradecer a todo el mundo que el torneo haya salido bien, las condiciones no eran fáciles. Me he sentido segura dentro y fuera de la cancha”, señaló sobre la competición, en la que las jugadoras tenían que permanecer obligatoriamente en los hoteles y solo salir para ir a los partidos y entrenamientos.
La segunda jugadora mundial optó por no participar en el US Open, en pista dura en Nueva York a finales de agosto, para centrarse en Roland Garros, que empieza el domingo.