¿Hacer campaña para la Casa Blanca desde una celda? No sería la primera vez

AFP

¿Podría Donald Trump hacer campaña tras las rejas? Pese a tener varios casos judiciales pendientes esto sigue siendo una perspectiva muy incierta pero no una hipótesis disparatada. En la historia de Estados Unidos, dos hombres ya lo han hecho.

Se trata de Eugene V. Debs y Lyndon LaRouche. 

Trump, quien compareció el jueves ante una jueza en Washington, ya ha advertido que aunque sea condenado seguirá con la campaña. De hecho, según los expertos, nada en la Constitución se lo impide. 

Estas son las historias de dos pioneros: un líder sindical y un polemista de extrema derecha. 

– El anticapitalista –

Su nombre no resulta familiar hoy en día pero Eugene V. Debs, nacido en 1855, fue en su época un político famoso que acaparó titulares. 

Y sigue siendo toda una personalidad para los activistas de izquierda estadounidenses. 

El senador Bernie Sanders, uno de sus admiradores, incluso hizo un documental en 1979 sobre este ferviente anticapitalista que recorrió el país para defender los derechos de los trabajadores. 

Eugene V. Debs fue cinco veces el candidato de los socialistas a las presidenciales. 

A las de 1920 se presentó desde una celda donde purgaba una condena a diez años de prisión por haber llamado en 1918 a oponer resistencia al reclutamiento obligatorio para la Primera Guerra Mundial. 

“Me han acusado de hacer obstrucción a la guerra. Lo reconozco. Señores, odio la guerra”, dijo al jurado durante el juicio. 

El “recluso número 9653” obtuvo más de 900.000 votos ese año. Le conmutaron la sentencia en 1921 y fue liberado. Murió cinco años después.

– El polemista –

Lyndon LaRouche se presentó ocho veces a las presidenciales. Participó en todas desde 1976 hasta 2004. 

Este polemista de extrema derecha y adepto de las teorías de la conspiración, nacido en 1922, comenzó su carrera política después de la Segunda Guerra Mundial en la extrema izquierda, antes de fundar el Partido de los Trabajadores Estadounidenses, bajo cuya bandera se presentó en 1976.

Posteriormente probó suerte como demócrata (para disgusto del partido) o independiente. 

A lo largo de su vida su ideología evolucionó hacia las tesis de extrema derecha y se le acusó muchas veces de antisemitismo, lo que él negó.

Fue escéptico sobre el calentamiento global y defendió muchas teorías de la conspiración, como por ejemplo que la reina de Inglaterra estaba implicada en narcotráfico o que el político estadounidense Henry Kissinger era un “agente de influencia” de los soviéticos. 

A finales de la década de 1980 Lyndon LaRouche fue sentenciado a 15 años de prisión por evasión de impuestos, lo cual no le impidió presentarse a las elecciones de 1992 desde la cárcel.

Grababa mensajes sobre la economía o la educación que se transmitían mientras él estaba encarcelado. 

Logró poco más de 26.000 votos en los comicios. 

Un amigo cercano de Donald Trump, Roger Stone, lo calificó en el pasado de “buen hombre” y dijo que “conoce bien el pensamiento extraordinario y profético de Lyndon LaRouche”.

Falleció en 2019 a los 96 años.