Ex presidenta de Bolivia dice que extendieron su detención por seis meses más

AFP

La justicia boliviana amplió este martes por seis meses más la detención preventiva de la expresidenta interina Jeanine Áñez, según su cuenta de Twitter.

“Imponen en audiencia cautelar otros 6 meses más de injusta privación de libertad, violando los derechos humanos y las garantías”, dice el tuit publicado este martes.

Familiares de Áñez que administran su cuenta de Twitter dijeron desde la red social que “dividen un proceso para prolongar la detención” temporal.

De momento ninguna autoridad boliviana hizo comentarios.

Áñez sucedió en noviembre de 2019 al izquierdista Evo Morales, quien renunció a la presidencia, después de 14 años en el  poder, tras una convulsa situación política. La oposición lo acusó de haber promovido un fraude en las elecciones de un mes antes para quedarse en el poder hasta 2025.

La exmandataria fue detenida el 13 de marzo pasado, por los delitos de sedición, terrorismo y conspiración, a denuncia de la exparlamentaria del oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS), Lidia Patty.

Siete días después de su detención, la justicia dictó seis meses de cárcel preventiva, pero luego el gobierno presentó otras acusaciones más contra ella, como incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución.

Una comisión de fiscales que impulsa el juicio solicitó a fines del pasado a la justicia  separar en dos juicios: por un lado los de sedición, terrorismo y conspiración, y por el otro los de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la carta magna.

La detención preventiva tiene el fin de contar con el tiempo suficiente para probar todos los presuntos delitos cometidos por la exmandataria derechista.

La convulsión política de fines de 2019 dejó unos 35 muertos, según una investigación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Junto a Áñez están detenidos dos de sus exministros, así como una decena de exjefes militares.

El oficialismo maneja la versión de que Morales sufrió un “golpe de estado”, mientras la oposición señala que hubo una rebelión popular contra los planes de mantenerse en el poder.