AFP
Escocia impondrá una “cuarentena controlada” a todas las personas procedentes del extranjero, anunció este martes su primera ministra, Nicola Sturgeon, calificando de insuficiente la política del gobierno británico de aislar en hoteles vigilados solo a quienes llegan de ciertos países.
Esta nueva regla, cuyas modalidades no detalló, comenzará a aplicarse lo antes posible, afirmó Sturgeon ante el regional Parlamento escocés, asegurando que es necesaria para evitar la importación de nuevas cepas de coronavirus.
El ejecutivo de Boris Johnson anunció la semana pasada que sólo los viajeros procedentes de países de “alto riesgo” por nuevas variantes del covid-19 –que incluyen a toda Sudamérica y Panamá- tendrán que permanecer diez días en cuarentena en hoteles, en virtud de una normativa que aún no ha entrado en vigor.
El resto podrán seguir entrando en el país a condición de presentar una prueba negativa de covid-19 y comprometerse a respetar una cuarentena en su alojamiento.
Pero Sturgeon consideró que “para minimizar el riesgo de que entren nuevas cepas en el país, la cuarentena controlada debe ser mucho más exhaustiva”.
No está claro sin embargo cómo funcionará la medida ni qué ocurrirá con las personas que lleguen a otras partes del Reino Unido y de ahí viajen a Escocia.
Sturgeon aseguró que su administración -con competencias en materia de sanidad pero no de inmigración- seguirá instando al gobierno de Johnson a adoptar un enfoque similar.
País más castigado de Europa por la pandemia, con más de 106.500 muertos, el Reino Unido se encuentra en su tercer confinamiento, iniciado en cada una de sus cuatro regiones según sus calendarios independientes.
La situación está mejorado lentamente y los responsables de las cuatro administraciones -Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte- están considerando la posibilidad de empezar a levantar progresivamente las restricciones en las próximas semanas.
En Escocia, el confinamiento se mantendrá al menos hasta finales de este mes, pero puede haber “una relajación cuidadosa y gradual” en torno a “principios de marzo”, afirmó Sturgeon, precisando que las escuelas volverán a abrir allí de forma escalonada en la última semana de febrero, empezando por las guarderías y la educación infantil.