AFP
Ucrania se juega algo más que una semifinal de repesca para la Copa del Mundo el miércoles contra Escocia en Glasgow (18h45 GMT): defenderá sobre el césped el orgullo de un país atacado por Rusia.
Oleksandr Petrakov intentó alistarse al ejército para defender su país pero su petición fue rechazada, ya que las autoridades le dijeron que sería más útil en su rol de seleccionador clasificando a Ucrania al Mundial de Catar.
“Es crucial seguir concentrado” en el fútbol e intentar olvidar la guerra durante 90 o 120 minutos, explicó en el diario esloveno Delo, después de que la “Zbirna” se haya preparado en Brdo pri kranju, 20 kilómetros al norte de la capital Liubliana.
“Durante los entrenamientos, el uso de teléfonos móviles está estrictamente prohibido”, añadió el entrenador, que sustituyó el verano pasado a Andryi Shevchenko.
Los jugadores “podrían enfadarse rápidamente”, ya que “sus pensamientos están siempre en otra parte y hay que calmarlos todo el tiempo. Sus familias están en Ucrania, sus amigos en el campo de batalla”.
“Antes de este partido contra Escocia, debemos escapar de todo pensamiento alternativo”, afirmó el experimentado guardameta ucraniano Andriy Pyatov (37 años) en el sitio internet de su federación.
– “Un poco de aire fresco” –
Pero la guerra planeará inevitablemente sobre el partido. “Es el encuentro más importante de nuestra historia”, afirma a la AFP Iryna Koziupa, periodista del sitio deportivo Tribuna.com, que cubre al equipo nacional.
“Ya no se trata ni siquiera de fútbol sino de esperanza para toda la gente de Ucrania. Será una señal de que la guerra no nos rompe”, añade, explicando que va a cubrir el partido “desde mi casa, delante de mi ordenador”.
“Solo un pequeño grupo de periodistas ha seguido al equipo en Eslovenia, y después en Escocia”, explica a la AFP el habitual intérprete de la selección, Andriy Bidnyk, pero que “no trabaja para los periodistas, esta vez”. Se ha quedado en su casa, en Dnipro, ciudad “todavía segura actualmente, felizmente”, precisa.
“Esta partido contra Escocia ofrece un poco de aire fresco, al menos por un momento”, afirma Andriy Bidnyk. “Es una posibilidad de ganar otra batalla, esta pacífica”.
“Tenemos la costumbre de reunirnos en bares o en casas de amigos para ver estos partidos”, prosigue, “pero esta vez, con la guerra, la mayoría de los ucranianos lo mirará en sus casas, o en sus nuevos hogares en el caso de aquellos que hayan dejado sus casas…”
– Glasgow se le da bien a Ucrania –
Si Ucrania gana, habrá una final a jugar en Gales, el domingo (18h45 GMT), para intentar clasificarse en el Grupo B de la Copa del Mundo, con Inglaterra, Estados Unidos e Irán.
En el plano deportivo, la selección ucraniana guarda un excelente recuerdo de Glasgow, donde Artem Dovbyk había marcado el gol de la victoria en el último segundo de la prolongación contra Suecia (2-1), en octavos de final de la última Eurocopa.
En este contexto tan particular, Escocia no tiene un buen papel a jugar, por todo lo que representaría una victoria de Ucrania simbólicamente.
“Les hemos dado todo el tiempo que necesitaban” (el partido había sido aplazado, NDLR), explicó el capitán escocés Andy Robertson a la BBC. “Les hemos ayudado tanto como pudimos, pero el miércoles, debemos estar listos a pelear por nuestros sueños”.
Una clasificación final de Ucrania sería una bella historia, pero “el símbolo es la solidaridad de la que hemos hecho prueba”, explicó a la AFP el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin. “Pero sobre el terreno, cada equipo debe jugar. Estoy seguro de que Escocia jugará como si nada pasara, que es lo que debe hacer”.