Deshidratación, insolación y golpes de calor: consecuencias para la salud de las altas temperaturas

Lucía Quintanilla – Óscar Flores

En el contexto del impacto climático por fenómenos ambientales como El Niño y La Niña, El Salvador se verá afectado con sequía, que según el ministerio de Medio Ambiente, por lo que la temperatura ha ascendido a 42° centígrados, superando los promedios registrados. 

El calor, como respuesta al cambio climático, se verá presente en el país, junto a la poca cantidad de lluvia, se pronostica que afectará la cantidad y calidad de cultivos.

Según el ministro de Medio Ambiente, Fernando López, “una sequía, un aumento en la temperatura y una ausencia de lluvia, pueden impactar en todo el sector agrícola”. Anteriormente, el funcionario indicó que la temporada lluviosa iniciaría el 20 de mayo, sin embargo, aún no han habido precipitaciones en el territorio nacional.

Autoridades piden a salvadoreños y agricultores estar preparados para adaptarse al cambio climático, ya que el inicio de la época de lluvia es más lento y variable, y en algunos sectores será casi nulo. 

En algunos departamentos del oriente del país, la sequía ya es una realidad, los suelos se presentan áridos por la falta de lluvia y no hay pasto para alimento de las reses, para lo que el MARN trabajará en conjunto con el Ministerio de Agricultura, para fomentar prácticas agrícolas sustentables.

Se prevé que para este fin de semana algunos sectores como la zona oriental serán los más afectados. Algunas consecuencias que podrían darse debido a esta ola de calor son la deshidratación, insolación, golpes de calor, fatiga extrema, mareos, entre otras.

Para prevenir dichas afectaciones, entidades como la Organización Mundial de la Salud recomienda tomar abundantes líquidos, permanecer en lugares frescos, usar ropa ligera, evitar exponerse de manera prolongada al sol ya que esto disminuye la capacidad de la piel de mantenerse humeda y controlar la temperatura corporal.