Corte de apelaciones de EEUU parece inclinarse por la prohibición de píldora abortiva

AFP

Una corte federal de apelaciones pareció inclinarse el miércoles a favor de los opositores del aborto que impugnan la autorización otorgada hace más de 20 años en Estados Unidos a una píldora para la interrupción del embarazo.

Los debates se centran en la mifespristona (inicialmente denominada RU-486) que, combinada con otro medicamento, ha sido utilizada por unas 5,6 millones de mujeres desde su autorización en el año 2000 por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA). 

A inicios de abril, un juez de primera instancia suspendió su autorización de venta al argumentar -pese al consenso científico- riesgos para la salud de las mujeres. 

El gobierno del demócrata Joe Biden apeló en urgencia y la Corte Suprema restableció la autorización de esta píldora, mientras el proceso continuaba.

El miércoles, tres jueces de una corte de apelaciones de Nueva Orleans, de reputación conservadora, escucharon los argumentos de fondo de las partes. 

En la audiencia, accesible vía telefónica, los jueces se mostraron severos con el abogado del gobierno.

“La historia que usted nos cuenta es que nadie puede cuestionar a la FDA”, dijo el magistrado James Ho. “Tenemos derecho a examinar a la FDA como a cualquier otra agencia, es el rol de los tribunales”, agregó.

De otra parte, su colega Jennifer Elrod, señaló la severidad del Departamento de Justicia ante la decisión en primera instancia. “Estos ataques personales ¿son apropiados?”, preguntó la jueza. 

La abogada Sarah Harrington respondió que no se trataba de ataques personales sino de críticas al “análisis” del juez. En contraste, los jueces se mostraron conciliadores con los abogados de los demandantes, una coalición en contra del aborto. 

A la salida de la audiencia, los defensores del derecho al aborto manifestaron pesimismo. “Los dados están cargados porque los jueces del caso son conocidos por su increíble hostilidad al aborto”, comentó a su vez Jennifer Dalven de la poderosa organización de derechos civiles ACLU.

La decisión de la corte de apelaciones, sin embargo no marca el fin de esta batalla legal, esta podrá ser examinada por el conjunto de magistrados de ese tribunal y ser objeto de un nuevo recurso ante la Corte Suprema de Estados Unidos.