Las autoridades chinas dinamitaron parte de una represa en el este de China donde las aguas alcanzaban un nivel crítico debido a unas lluvias torrenciales, informaron este lunes los medios del país.
El centro y el este de China están golpeados desde junio por intensas precipitaciones e inundaciones, que han causado al menos 140 muertos y desaparecidos, según balances oficiales.
La creciente intensidad de las lluvias en las últimas semanas provocó una brusca e inquietante subida de las aguas en torno al Yangtsé, el más largo río chino, que afecta a unos 24 millones de personas, según el ministerio de Situaciones de emergencia.
En la provincia del Anhui (este), una represa del río Chu fue dinamitada el domingo pues el nivel del agua se acercaba peligrosamente a un nivel histórico.
La medida fue adoptada para garantizar la seguridad de los ribereños, según las autoridades.
Fotos publicadas por los medios muestran inmensas extensiones sumergidas bajo las fangosas aguas, tras la destrucción de una parte de la represa.
Las inundaciones suelen producirse cada verano en China debido a las lluvias de temporada y al deshielo de las nieves en el Himalaya.