Cataluña reforzará el uso obligatorio de mascarilla tras un fuerte rebrote

AFP

El gobierno regional catalán anunció este martes que endurecerá el uso obligatorio de la mascarilla, incluso cuando se mantenga la distancia interpersonal, tras un rebrote que preocupa “mucho” a las autoridades sanitarias españolas y obligó a aislar a 200.000 personas.

“La voluntad es que siempre sea obligatorio el uso de la mascarilla, más allá de la distancia entre personas”, dijo en rueda de prensa en Barcelona la portavoz del ejecutivo regional, Meritxell Budó.

Actualmente, el uso de la mascarilla es obligatorio en toda España siempre que no pueda mantenerse una distancia interpersonal de 1,5 metros, así como en el transporte público.

Las autoridades regionales, que el sábado aislaron a 200.000 habitantes en los alrededores de la ciudad de Lérida (150 km al oeste de Barcelona) por un rebrote con cientos de contagios, prevén extender esta obligatoriedad.

“Hemos podido ver ciertas actitudes de relajamiento en el uso de las mascarillas (…), entendemos que quizás debemos ir un poco más allá”, dijo Budó.

La medida y los detalles de su aplicación deben aprobarse en una reunión del servicio de protección civil prevista para el miércoles, explicó.

El anuncio llega tras el confinamiento de 200.000 personas de una comarca alrededor de Lérida, donde desde comienzos de junio se detectaron más de 1.000 contagios. Según los datos regionales, hubo 64 casos más en 24 horas.

“Nos están preocupando los brotes de Lérida, nos están preocupando mucho”, advirtió el lunes el director del centro de emergencias sanitarias español, Fernando Simón.

Otra comarca en Galicia (noroeste), con 70.000 habitantes, también está aislada perimetralmente, con sus accesos cerrados, pero el volumen de casos allí apenas supera el centenar.

El brote en Cataluña, donde los independentistas en el poder habían sido muy críticos con la gestión nacional de la pandemia, despertó dudas sobre el sistema de detección de contagios implementado en la región, con competencias en sanidad.

La portavoz del gobierno catalán defendió su gestión pero reconoció que “se está replanteando de qué manera se puede hacer más efectivo el sistema de rastreo de contactos”.

Con más de 28.300 fallecidos, España es uno de los países más castigados por el coronavirus en Europa. Desde mediados de marzo hasta el 21 de junio, el gobierno aplicó uno de los confinamientos más estrictos del mundo.