AFP
El boxeador Félix Verdejo, acusado del cruento asesinato de una mujer embarazada, compareció este lunes ante una jueza federal en Puerto Rico que ordenó su prisión sin fianza, en un caso que desata protestas contra el feminicidio en este territorio estadounidense.
Félix “El Diamante” Verdejo, de 27 años, se había entregado a la justicia el domingo tras una orden de arresto que lo acusó de tres cargos por el secuestro y asesinato de Keishla Rodríguez y de su hijo no nacido.
Este lunes, la jueza federal en San Juan Camille Vélez, le leyó los cargos en una vista virtual y ordenó su prisión sin fianza hasta una próxima audiencia, en la que se espera que el ex púgil olímpico se declare culpable o inocente, informó el diario local El Nuevo Día.
Una denuncia federal obtenida por AFP señala que Verdejo, quien está casado y además tenía una relación con Rodríguez, habría secuestrado a la víctima el 29 de abril luego de que ella le pidiera ayuda para terminar su embarazo.
“La golpeó en la cara y le inyectaron una substancia con una jeringa”, indica la declaración jurada del agente del FBI que condujo la investigación.
De acuerdo al texto, Verdejo y un testigo de los hechos amarraron a Rodríguez de pies y manos, la ataron a un bloque y, tras conducir hacia una laguna en San Juan, “la lanzaron al agua por el puente”. Luego él le disparó cuando la víctima ya estaba en el agua.
El FBI halló evidencias de que Verdejo y Rodríguez, de 27 años, se habían comunicado por teléfono el día del secuestro y una cámara de seguridad muestra un coche igual al del boxeador parado en el puente.
Rodríguez había sido reportada desaparecida el jueves y el cadáver fue hallado en la laguna San José el sábado. Su familia había señalado al boxeador como el responsable de su desaparición y luego de su muerte.
El caso desató protestas en Puerto Rico, cuyo gobernador, Pedro Pierluisi, declaró en enero estado de emergencia debido por la violencia contra las mujeres.
Verdejo, que tiene un recorrido de 27 peleas ganadas (17 por nocaut) y dos perdidas, representó a Puerto Rico en los Juegos Olímpicos de Londres-2012, y ese mismo año comenzó su carrera profesional en la categoría de peso ligero.
Tuvo problemas con la continuidad de su carrera al sufrir un accidente de moto en 2016.