No pudieron pagar el cuartito donde vivían, y fueron lanzadas a la calle sin ninguna oportunidad de un techo digno. Su cruda realidad las tiene viviendo y durmiendo en el interior de un carro viejo, azotadas por la pobreza.
No pudieron pagar el cuartito donde vivían, y fueron lanzadas a la calle sin ninguna oportunidad de un techo digno. Su cruda realidad las tiene viviendo y durmiendo en el interior de un carro viejo, azotadas por la pobreza.