AFP
Al menos ocho personas murieron y otras diez resultaron heridas el domingo tras ser embestidas por un vehículo en la ciudad de Brownsville, Texas, en la frontera estadounidense con México, frente a un centro de acogida de migrantes.
Las fuerzas de seguridad informaron que, por el momento, el incidente era tratado como accidente, aunque un testigo dijo a la AFP que el conductor había gritado insultos al grupo antes de acelerar.
“Recibimos una llamada por una camioneta gris que se pasó una luz roja y atropelló a varias personas. Confirmamos que hay siete personas que fallecieron y otras que han ido al hospital”, dijo a la AFP Martín Sandoval, portavoz de la policía de Brownsville, una ciudad en el extremo sur del estado de medio millón de habitantes.
Los medios locales informaron después que una persona murió también en un hospital, por lo que de momento el número de fallecidos es de ocho.
El oficial dijo a la prensa que las personas estaban esperando en una parada de autobús cuando fueron arrolladas.
“Tenemos que son casi como diez (heridos) pero puede haber más. El chofer del vehículo lo tenemos detenido, está bajo arresto, pero lo tenemos en el hospital porque él también recibió varias heridas”, agregó Sandoval. Detalló que algunas de las personas fallecidas eran migrantes y que se trabaja con la patrulla fronteriza para tener más detalles de sus ingresos.
El conductor del vehículo será procesado por conducción temeraria, pero podría ser objeto de otros cargos, según la policía.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro pidió investigar el suceso en el que murieron varios venezolanos.
“Venezuela exhorta a las autoridades estadounidenses (…) a investigar en profundidad los hechos y esclarecer sus causas, con el fin de descartar cualquier intencionalidad relacionada a las prácticas de odio y xenofobia”, indicó la Cancillería en un comunicado, sin precisar el número de migrantes de ese país muertos.
El obispo de Brownsville, Daniel Flores, dijo en un comunicado que los fallecidos eran “hombres inmigrantes de Venezuela” y exhortó a “resistir la tendencia corrosiva de desvalorar las vidas de los inmigrantes, los pobres y los vulnerables”.
– “De repente” –
“Fue de repente. Una señora pasó en un carro y nos avisa que nos apartemos y nos apartamos. Fue en cuestión de momentos. El asesino venía en el carro señalándonos, insultándonos, diciéndonos cosas como ‘motherfucker’ (hijo de puta), no sé, cosas así que no entiendo”, contó a la AFP Luis Herrera, un venezolano de 36 años que estaba en el lugar y resultó herido en un brazo.
“Le dio todo el volumen (velocidad) al carro y a mí me pasó por un lado nada más”, sostuvo señalando su brazo.
“No estamos diciendo que es intencional. Por ahora lo estamos tratando como un accidente” aunque la intencionalidad “es un factor que tenemos que considerar”, aseguró Sandoval.
El incidente tuvo lugar cuando el gobierno de Estados Unidos se prepara para el levantamiento de una medida sanitaria conocida como Título 42, que por la pandemia de covid-19 ha permitido a los agentes de la patrulla fronteriza deportar o rechazar a los migrantes sin siquiera aceptar sus solicitudes de asilo.
El vencimiento de esta norma este jueves hace que las autoridades teman un aumento en el número de migrantes que ingresan ilegalmente por el sur de Estados Unidos.
El arrollamiento masivo tuvo lugar frente al Centro Ozanam, un albergue de acogida de personas sin hogar y migrantes muy activo en las últimas semanas debido a “la afluencia actual” de personas que cruzan la frontera desde México, explicó Sandoval.
Las víctimas se encontraban en un grupo de unas 25 personas que esperaban en una parada de autobús, según Víctor Maldonado, director ejecutivo del centro de acogida.
Maldonado, que describió una escena espeluznante, con partes de cuerpos a lo largo de la calle, indicó que el grupo era compuesto únicamente por venezolanos que acababan de desayunar en las instalaciones.
Los testigos estaban “realmente conmocionados”, dijo Maldonado a la AFP.
El centro Ozanam está abierto 24 horas, explicó Maldonado. Comentó que alojan a personas que vienen migrando desde Chile, Colombia, Ecuador, China, Ucrania y Venezuela.
El legislador de Texas Vicente González, un demócrata cuyo distrito incluye a Brownsville, afirmó en Twitter que estaba “rezando por todos los involucrados en este horrible incidente”.
Este hecho se produce un día después de que un hombre matara al menos a ocho personas en un centro comercial, también en Texas, en el tiroteo masivo más reciente que sacudió al país.