AFP
Donald Trump pasó años trabajando en proyectos comerciales en China donde mantenía una cuenta bancaria, informó el martes el diario The New York Times en momentos en los que el presidente estadounidense trata de mostrar a su rival demócrata, Joe Biden, como débil ante Pekín.
Trump viene repitiendo en los últimos días que Hunter Biden, hijo del candidato, vendió a Ucrania y China el acceso a la influencia de su padre cuando era vicepresidente en la época de Barack Obama.
El diario informó que es Trump quien tenía una oficina en China durante la campaña presidencial de 2016 y estaba asociado con una gran empresa controlada por el gobierno chino.
Además, el presidente tenía una cuenta bancaria en China hasta ahora desconocida que era manejada por la corporación Trump International Hotels Management, según documentos fiscales de Trump examinados por el periódico.
Además de China, el mandatario hizo lo mismo en Gran Bretaña e Irlanda.
Las declaraciones de impuestos muestran que la firma de Trump “pagó USD 188.561 en impuestos a China mientras procuraba conseguir allí permisos para hacer negocios entre 2013 y 2015”, dice el diario.
Alan Garte, abogado de Trump Organization, dijo que la compañía “abrió una cuenta en un banco chino que tiene oficinas en Estados Unidos para pagar impuestos locales”.
“No se materializó ningún acuerdo, transacción u otros negocios y desde 2015 la oficina está inactiva”, dijo al New York Times. “Aunque la cuenta bancaria sigue abierta, no ha sido usada para otro propósito”, añadió.
Desde que entró a la Casa Blanca en 2017, Trump ha definido a China como la mayor amenaza para Estados Unidos y la democracia mundial.
En 2008 Trump intentó infructuosamente la construcción de un edificio de oficinas en Guangzhou y en 2012 abrió una oficina en Shangai, informó el periódico.
Además, la Trump Hotel Collection negoció emprender un proyecto en Pekín con la State Grid Coroportation, la quinta compañía de electricidad más grande de China, dijeron fuentes a la AFP. Pero el proyecto fue luego abandonado.
Hasta ahora, las declaraciones de impuestos de Biden y sus actividades financieras no han mostrado conexiones con China.