AFP
Sin duda frustrado por haberse perdido el Mundial de Catar, y presentado como el eslabón perdido que guiará al Manchester City en la Champions League, Erling Haaland se enfrenta a su Everest, y deberá superar al Leipzig el miércoles en la ida de octavos de final para seguir el ascenso.
El vigente campeón de Inglaterra fue el segundo club mejor representado en Catar con 16 jugadores seleccionados, después del Barcelona y empatado con el Bayern Múnich.
Pero la invitación no incluyó a su atacante estrella.
Tercero del grupo G con Noruega, detrás de Países Bajos y Turquía, Haaland sabe que el acceso siempre será difícil para la 43ª nación mundial de la clasificación FIFA, aunque la competición pase a 48 equipos en 2026, como quiere la federación.
Toda su ambición recae por lo tanto en la Champions League, una competición en la que se lució con el Salzburgo, brilló con el Borussia Dortmund y ahora desea ganar con City.
En su primer partido en la mayor competición europea, en 2019, convirtió un hat-trick en 45 minutos para los austriacos ante los belgas de Genk (6-2).
Desde entonces lleva 28 goles en 23 encuentros, cinco en cuatro partidos de fase de grupos con City.
Haaland llegó a los cuartos de final con el Borussia Dortmund en 2021, antes de caer contra el City (2-1, 2-1), y sabe que las expectativas son ahora mucho más altas.
– Un jugador a parte para City –
“Haré todo lo que esté en mi poder para ganar trofeos, aquí, con Manchester City, e intentar ser el que incline la balanza en los partidos”, prometió recientemente en la revista GQ.
“Mi objetivo es ganar la Champions League, espero”, añadió.
Todo lo que no sea llegar a la final y ganarla sería una decepción, tras llegar su fichaje este verano como la guinda de una plantilla que estuvo tantas veces cerca de la gloria.
El año pasado, en la vuelta de semifinales ante el Real Madrid, un doblete de Rodrygo en el descuento y un penal de Karim Benzema en la prórroga echaron a perder un increíble derroche del City, tanto en la ida como en la vuelta (3-4, 3-1).
“Es un goleador extraordinario, siempre intenta marcar y ayudar al equipo. Es el atacante que necesitábamos”, aseguró el lunes a la UEFA el portero Ederson.
Por su estilo y sus características atléticas, Haaland es ante todo un jugador como casi nunca los ha tenido el City.
“Haaland juega más por el centro, buscando meterse en el área para ser el objetivo en esa zona. Eso es lo que marca la diferencia”, añadió.
– Un menor control colectivo –
Sus ya increíbles estadísticas en Premier League, con 26 tantos en 23 partidos, mantienen unas expectativas que podrían ser excesivas, al menos por ahora.
Pese a su nueva máquina de goles, City tan solo ha marcado tres veces más (60 frente a 57) que el año pasado tras 24 encuentros, y tiene ocho puntos menos en la tabla (52 frente a 60).
Los de Pep Guardiola a menudo han dado la impresión de tener un menor control colectivo de sus partidos. Y cuando el coloso noruego estaba bien cubierto por la defensa rival, el equipo parecía no tener plan B para marcar, salvo algunas actuaciones esporádicas individuales de Kevin de Bruyne o Riyad Mahrez.
Fue un riesgo que Pep identificó desde el principio. “Erling tiene cualidades especiales. En los partidos importantes, puede resolver los problemas que se plantean. Pero si dejamos caer todo sobre los hombros de Erling, nunca ganaremos la Champions League”, advirtió antes del último partido de grupos, contra el Sevilla.
Pese a que Leipzig ha recuperado a Christopher Nkunku, parece un adversario al alcance del City. Pero los ingleses no deberán confiarse, a riesgo de que Haaland sea finalmente un coloso con pies de barro.