AFP
El prefecto de la policía de París reconoció este jueves ante el Senado que la gestión de la final de la Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Liverpool por parte de las fuerzas del orden fue “un fracaso”.
“Fue claramente un fracaso”, dijo Didier Lallement, mencionando las personas “zarandeadas” y “agredidas” y lamentando que “la imagen del país se haya visto socavada” tras este partido disputado en el Stade de France, al norte de París, el pasado 28 de mayo.
El responsable se disculpó también por haber autorizado el uso de gases lacrimógenos en la zona del estadio antes del inicio del partido, pero aseguró que “no había otra manera” de aliviar la presión en las puertas de entrada.
El partido más importante de la temporada en Europa estuvo marcado por los incidentes, con espectadores sin entradas que trepaban por las puertas, hinchas y familias rociados con gases lacrimógenos y numerosas víctimas de robos o asaltos.
“Para mí es una herida”, dijo el prefecto ante el Senado, donde ya comparecieron el 1 de junio la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, y el del Interior Gérald Darmanin.
Lallement secundó las cifras suministradas por Darmanin, que estimó que entre “30.000 y 40.000 personas” sin billetes o con entradas falsas estaban en la zona del Stade de France para esta final, en la que el Real Madrid se impuso 1-0 al Liverpool.
“Los primeros elementos confirman estas cifras”, dijo el responsable policial. “Yo di estos números al ministro y los asumo”, agregó, pese a que expertos y responsables deportivos británicos las han cuestionado.
Sin embargo, abrió la puerta a que “quizás” pudo equivocarse. “Nunca he pretendido que fuera perfectamente justo”, aseguró Lallement, reiterando no obstante que había demasiada gente respecto al aforo del estadio (79.000).
– Denuncias –
Durante su comparecencia, Gérald Darmanin aseguró que había “pedido sanciones” al prefecto de policía para dos miembros de las fuerzas de seguridad, responsables según él de usar gases lacrimógenos “en contra de las reglas de uso”.
Las dos investigaciones administrativas que permitirán decidir sobre estas sanciones están “en marcha”, indicó a la AFP el entorno del ministro.
“Las decisiones tomadas” permitieron preservar “la integridad física de las personas y la celebración del partido”, dijo el prefecto, recordando que una huelga en trenes de cercanías provocó aglomeraciones.
Erwan Le Prévost, director de asuntos institucionales de la Federación Francesa de Fútbol (FFF), dijo ante los senadores que no estaban “preparados” ante “una tal afluencia de delincuentes”.
Una de las víctimas de los carteristas fue el alcalde de Liverpool, Steve Rotheram, quien cargó contra la falta de organización y la actuación policial, en declaraciones a la AFP antes de su declaración en el Senado.
Durante su intervención por videoconferencia, criticó también que las autoridades intentaran convertir en cabeza de turco a los aficionados del club de su ciudad.
Los hinchas británicos que fueron víctimas de delitos pueden presentar una denuncia ante los tribunales franceses a través de un formulario especial.
El prefecto de policía dijo que “alienta” a los hinchas a presentar una denuncia.
El club de Liverpool había pedido a sus seguidores que compartieran su experiencia durante el partido y logró recopilar miles de respuestas.
Por su parte el Real Madrid pidió el 3 de junio “respuestas” sobre el trato infligido a su afición durante la final y pidió “determinar quiénes son los responsables” de las caóticas escenas en el Stade de France.