AFP
El Kremlin aseguró este jueves que Rusia se había estado preparando desde finales de 2021 para la crisis alimentaria que afectó al mundo con el conflicto en Ucrania que empezó en febrero de 2022.
“La principal causa este año del hambre en el mundo son las medidas económicas irreflexivas de Estados Unidos y de la UE”, dijo un consejero del Kremlin, Maxim Oreshkin, durante un foro de jóvenes en Moscú, en referencia a las sanciones contra Rusia, que minan su capacidad de exportación de fertilizantes y trigo.
Oreshkin señaló, según las agencias de noticias rusas, que el presidente Vladimir Putin preparó el país a las consecuencias de una crisis alimentaria mundial desde finales de 2021, es decir antes de la ofensiva contra Ucrania que inició en febrero de 2022 y cuando el temor a un conflicto empujaba ya al alza los precios de los alimentos.
Putin “entendió que esos temas [alimentarios] podrían afectar a Rusia. Por ello, comenzamos desde finales de año a preparar a Rusia activamente a la hambruna en el mundo”, agregó.
En ese momento Rusia ya experimentaba una inflación de los precios de alimentos y había introducido restricciones o tasas a las exportaciones de cereales, aceites y fertilizantes.
“Eso nos permite [ahora] estar seguros de nosotros”, dijo Oreshkin.
Según Moscú, no es el inicio del conflicto en Ucrania, uno de los principales exportadores mundiales de trigo, que provoca la crisis alimentaria, sino las sanciones occidentales tomadas en represalia.