AFP
El Sevilla se quedó fuera de la Champions este miércoles tras perder 1-0 en el campo del Salzburgo, que jugará los octavos de final del torneo continental.
Un tanto de Noah Okafor (50) apeó al equipo andaluz, que necesitaba la victoria para pasar y se quedó en la tercera posición del grupo G, por detrás del Salzburgo.
El equipo austríaco acompañará a octavos al Lille francés, líder de la llave, que ganó este miércoles 3-1 al Wolfsburgo alemán en el otro encuentro del grupo.
El Sevilla, que se quedó con diez en el partido por la expulsión de Joan Jordán (64), disputará ahora una eliminatoria para poder acceder a los octavos de final de la Europa League.
El equipo andaluz, que sólo ha ganado un encuentro en esta fase de grupos, necesitaba ganar para superar al Salzburgo en la clasificación, pero el conjunto austriaco supo frenar a su rival.
Obligados por las circunstancias, los hombres de Julen Lopetegui llevaron la iniciativa del encuentro, buscando controlar el juego frente a un Salzburgo que buscaba dar ritmo al encuentro.
El equipo local subía a presionar arriba al Sevilla, que buscaba salvar el acoso saliendo por los costados y abriendo el campo.
La velocidad de Lucas Ocampos y la habilidad de Alejandro ‘Papu’ Gómez acercaban a los sevillistas al área, pero se estrellaban en la buena defensa rival.
En una primera parte sin auténticas acciones de peligro, el Sevilla pudo adelantarse en un disparo desde la frontal de Ivan Rakitic que obligó a volar al portero Philipp Kohn (35).
Frente al control propuesto por el Sevilla, el Salzburgo buscaba el contraataque y el pase largo en busca de sus puntas Karim Adeyemi y Noah Okafor.
– Conexión letal –
Los dos delanteros locales conectaron nada más comenzar el segundo tiempo para adelantar al equipo austriaco cuando Okafor remató a bocajarro un pase desde la izquierda de Adeyemi (50).
Sólo dos minutos antes el Sevilla había visto el gol muy de cerca en un remate de cabeza de Munir El-Haddadi al larguero (48), que habría puesto por delante al equipo español.
Por debajo en el marcador, el Sevilla, que hasta ese momento controlaba el encuentro, atravesó por unos minutos de desconcierto, antes de recuperar el control, poniendo más intensidad a su juego.
Lopetegui movió el banquillo tratando de meter más pólvora en el campo, pero cuando el Sevilla estaba volviendo a llegar, Jordán agarró a Adeyemi viendo la segunda amarilla y siendo expulsado (64).
Las cosas se ponían cuesta arriba para el Sevilla, que tras el gol del Salzburgo necesitaba dos tantos para dar la vuelta a la eliminatoria.
El equipo andaluz no renunció al ataque, pero con uno menos fue más vulnerables a los rápidos contraataques del rival, que pudo ampliar su cuenta en un disparo desde la frontal de Benjamin Sesko que detuvo Bono (72).
En los últimos minutos, el Salzburgo cerró filas atrás esperando a un Sevilla que empezó a jugar más con el corazón que con la cabeza, sin conseguir remontar el resultado.