AFP
El presidente israelí Reuven Rivlin denunció este miércoles los graves disturbios registrados en la ciudad israelí de Lod, donde una buena parte de la población es árabe, y los calificó de “pogromo”.
“Las escenas de pogromo en Lod y los disturbios en todo el país por parte de una multitud árabe sedienta de sangre, que hirió a personas, provocó daños materiales e incluso atacó lugares sagrados para el judaísmo son imperdonables”, dijo Rivlin en un comunicado.
Lod, colindante al aeropuerto internacional de Ben Gurión, es una ciudad de 77.000 habitantes situada entre Tel Aviv y Jerusalén, de los cuales 47.000 son judíos y 23.000 palestinos con ciudadanía israelí.
Estos últimos, descendientes de palestinos que continuaron en sus tierras tras la creación de Israel en 1948, constituyen un 20% de la población del país y se dicen a menudo víctimas de discriminaciones con respecto a la mayoría judía.
En la noche del martes a este miércoles, se registraron episodios de violencia en varias ciudades israelíes en las que una parte importante de la población es árabe, en un momento en que Hamás, que gobierna en la Franja de Gaza, lanzaba cohetes hacia Israel y el ejército israelí bombardeaba el enclave palestino.
En total, 270 personas fueron detenidas en Israel por estos actos violentos, indicó la policía.
“El gobierno israelí debe perseguir a los alborotadores con firmeza”, declaró Rivlin este miércoles, criticando el “vergonzoso silencio” de los responsables políticos árabes israelíes.
“La destrucción, por alborotadores árabes, de una bandera israelí, que fue reemplazada por la bandera palestina, es un ataque brutal a la coexistencia en el Estado de Israel”, agregó.
En Lod, el gobierno desplegó en la noche unidades de policía suplementarias, cuando, según medios israelíes, se prendió fuego a tres sinagogas y varios comercios.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, decretó el estado de emergencia en Lod, donde murió un ciudadano árabe israelí la noche del lunes al martes, cuando estallaron los primeros disturbios en la localidad, según la policía.
El aumento de la violencia en Israel y en los territorios palestinos se produce tras varios días de enfrentamientos y tensión en Jerusalén Este, un sector palestino ocupado y anexionado por Israel.