AFP
Edwin, pese al nuevo coronavirus, está seguro de votar en las elecciones presidenciales y parlamentarias del 5 de julio en República Dominicana. Carlos, al contrario, duda por temor a contagiarse. En plena pandemia, los dominicanos cuentan los días para los comicios.
Viven una campaña electoral atípica en la que el principal candidato opositor dio positivo por el virus. Las calles muestran las tradicionales vallas con los rostros de los aspirantes, pero no hay mítines, ni eventos masivos, prohibidos por el gobierno de Danilo Medina para frenar la enfermedad.
“Yo no tengo dudas: yo voy a votar, no tengo ni temor ni nada. Es posible que vaya hasta de madrugada. He votado siempre”, dice a la AFP Edwin Disla, de 59 años, reconocido escritor en la isla, mientras charla con amigos como si fuese un sábado cualquiera en una esquina del parque Colón, en la zona colonial de Santo Domingo.
El lugar estaría normalmente lleno de turistas, pero ahora es poco visitado debido al covid 19. El turismo representa 8% del PIB en este país de 10,6 millones de habitantes.
Unos 7,5 millones están habilitados para votar por presidente, vicepresidente, 32 senadores, 190 diputados y 20 representantes en el Parlamento Centroamericano.
La pandemia ya obligó a las autoridades a aplazar una vez las votaciones, originalmente pautadas para el 17 de mayo, pero el 5 de julio se harán “sí o sí”, aseveró el lunes el presidente de la Junta Central Electoral, Julio César Castaños.
No todos comparten el entusiasmo. Carlos Encarnación, de 32 años, vacila: “Normalmente voto. Esta vez, depende de cómo siga este virus iré a votar. Mi vida y mi salud están primero”.
El país caribeño registraba hasta este miércoles 28.631 casos confirmados y 691 muertes por COVID-19, según el Ministerio de Salud Pública.
Dos candidatos tienen las mayores posibilidades de gobernar República Dominicana por los próximos cuatro años: Luis Abinader, del opositor Partido Revolucionario Moderno (PRM), y Gonzalo Castillo, del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD), ambos de centroizquierda.
– “Aprender a vivir” con el virus –
Abinader, quien informó el 11 de junio haber contraído coronavirus, concentra 53,7% de intención de voto, según una encuesta de la consultora Gallup.
Castillo, en ese sondeo, captura un 35,5% y el expresidente Leonel Fernández, de 66 años, quien ha gobernado la isla en tres oportunidades (1996-2000 y 2004-2008 y 2008-2012), un 8,6%.
Ruth Santos, estudiante de periodismo de 27 años, votará.
“Tenemos que aprender a vivir con el COVID mientras esté. Estamos cansados de la corrupción”, dice a la AFP, refiriéndose a un mal que ha provocado masivas protestas en los últimos años en el país por casos como el de los sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. Dominicana ocupa el lugar 137, entre 180 países, en el índice de Transparencia Internacional.
A Evangelista Leocadio, vigilante de 44 años, no le anima como antes elegir presidente.
No duda por el coronavirus, sino por los candidatos. Ninguno le convence. “Estoy indeciso”, dice con su mascarilla puesta.
– “Mascarilla y sal a votar” –
En un proceso inédito por la pandemia, la dinámica de la campaña electoral cambió.
Sin poder organizar mítines, los partidos enfocaron su estrategia en pequeños encuentros con asistencia controlada.
Abinader, un empresario de 52 años, debió parar por su contagio y su lugar en la campaña lo tomó su llave vicepresidencial, Raquel Peña. Donó un hospital móvil para atención del COVID-19.
El candidato oficialista Castillo, por su parte, ha recorrido el país junto a su equipo de campaña -en el cual se cuentan funcionarios del gobierno de Medina-, pero sus reuniones con seguidores han tenido aforos limitados. Ha facilitado el retorno de dominicanos varados en el extranjero por la pandemia.
“Ponte tu mascarilla y sal a votar” es el eslogan de una pieza publicitaria de la autoridad electoral, que espera cumplir su promesa de que el país elija “sí o sí” un nuevo presidente y un Congreso que se instalen el próximo 16 de agosto.