AFP
La administración del republicano Donald Trump hizo el martes una nueva propuesta de plan de ayuda para reactivar la economía estadounidense, inmediatamente rechazada por los líderes de la oposición demócrata, que prefieren una iniciativa conjunta que negocian legisladores de ambos partidos.
“En nombre del presidente (Donald Trump) presenté una propuesta por 916.000 millones de dólares”, anunció el martes por la noche el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, en un comunicado publicado en la red Twitter.
El objetivo del plan oficial es romper un estancamiento de meses en las discusiones del Congreso sobre la asistencia adicional a la economía, devastada por la pandemia del coronavirus. Además, quieren acelerarlo porque Trump deberá dejar la Casa Blanca al demócrata Joe Biden en enero.
Su propuesta, mayor que una de 908.000 millones presentada por un grupo de senadores republicanos y demócratas la semana pasada, incluye “dinero para los gobiernos estatales y locales y robustas protecciones de responsabilidad para empresas, escuelas y universidades” afectadas por la pandemia, explicó Mnuchin.
Todos esos elementos han sido puntos clave en las complejas negociaciones entre los legisladores demócratas y republicanos.
Mnuchin precisó que el plan fue elevado el martes a la presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, pero también lo revisó con Trump, y el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell.
“Espero lograr un acuerdo bipartidista para que podamos brindar este alivio económico a los trabajadores, familias y empresas estadounidenses”, expresó el secretario del Tesoro.
– Al cruce –
Sin embargo, ya surgió el primer escollo: “Las negociaciones que emanan de los dos partidos son la mejor esperanza para una solución apoyada por los dos partidos”, subrayaron en un comunicado conjunto, Nancy Pelosi y Chuck Schumer, jefe de los senadores demócratas.
“La propuesta del presidente comienza por reducir la oferta de compensación por desempleo que actualmente discuten los miembros de la Cámara y el Senado de 180.000 millones de dólares a 40.000 millones”, lamentaron ambos líderes parlamentarios.
“Esto es inaceptable”, sentenciaron.
Este rechazo de los dos líderes demócratas arroja una vez más una dosis de incertidumbre sobre la adopción de un paquete de estímulo adicional antes de la toma de posesión de Biden, el 20 de enero, justo en momentos de un fuerte rebrote de la pandemia de covid-19, lo cual lleva a varios estados a restringir la actividad económica.
– Puntos espinosos –
Los demócratas y los republicanos del Congreso, junto con la administración Trump, no han podido ponerse de acuerdo durante meses sobre un proyecto de ley que suceda al paquete de rescate inicial planteado en la denominada Ley CARES -de 2.200 millones de dólares- aprobado a principios de este año para apoyar la golpeada economía estadounidense.
Ese proyecto de ley incluía préstamos y subvenciones para pequeñas empresas, pagos de 1.200 dólares a todos los ciudadanos estadounidenses y una expansión de la red de seguridad contra el desempleo, programas que se considera que preservan los empleos en Estados Unidos en momentos en que el gigante norteamericano lucha contra el mayor y más trágico brote de coronavirus en el mundo.
Pero gran parte de esa asistencia ya ha expirado y la propuesta de Mnuchin representa uno de los últimos esfuerzos para llegar a un acuerdo antes de la asunción de Biden y del nuevo Congreso.
También se avecina fin de mes, cuando muchos desempleados dejarán de cobrar ayudas enmarcadas en la Ley CARES.
Declaraciones más tempraneras del presidente republicano del Senado habían sugerido aprobar rápidamente los temas consensuados y dejar de lado para discutir los principales elementos de controversia.
“Mi punto de vista, y creo que es un punto de vista compartido literalmente por todos en ambos lados del pasillo, es que no podemos irnos sin hacer un proyecto de ley de covid”, dijo McConnell antes de oficializase la propuesta, aunque el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, expresó que “de ninguna manera”.
“Los esfuerzos del líder McConnell para socavar las negociaciones bipartidistas de buena fe son espantosos”, exclamó por su parte Pelosi.