Hamilton y Mercedes, una historia de amor por confirmar

AFP

Lewis Hamilton agradeció calurosamente a Mercedes el domingo haberle permitido convertirse en el poseedor del récord de victorias en Fórmula 1, pero el británico aún no ha renovado su contrato, que expira a final de año.

Aterrizado en 2013 con un Mundial y 21 victorias ya en su haber con McLaren, una escudería que entonces empleaba motores Mercedes, ha sido con el constructor alemán con quien ha levantado los otros cinco, y es el gran favorito para llevarse el Mundial-2020 y firmar así su 7º, lo que le haría igualar el récord de Michael Schumacher.

“¿Si pensaba que llegaríamos hasta aquí? Sabía que ganaríamos campeonatos, pero que íbamos a llevarnos tantas carreras por supuesto que no”, afirmó tras su 92ª victoria en Portimao (Portugal).

“No soy solo yo, es la historia, es todo el equipo”, insistió el campeón británico, de 35 años, que compite en la F1 desde 2007.

No es un secreto su deseo de continuar la aventura con la marca de la estrella para, como piensa su joven adversario Max Verstappen, superar los 100 triunfos. Pero todavía no ha renovado y la temporada concluye a mediados de diciembre.

Preguntado en Portimao sobre los motivos de este retraso, Hamilton se mostró tranquilizador sobre el estado de las conversaciones con su equipo.

– “Nunca es fácil” –

“Todavía no hemos hablado mucho sobre eso”, precisó. “Estar en una situación de negociaciones nunca es fácil” incluso en la tesitura de que un nuevo contrato podría ser, según él, solo una “formalidad”.

Su llegada a Mercedes debe mucho al gran campeón austríaco Niki Lauda, fallecido el año pasado. Fue él quien lo convenció, cuando era vicepresidente no ejecutivo de Mercedes F1, de abandonar McLaren cuando Mercedes no había ganado en ese momento ningún campeonato desde su regreso a la F1 en 2010.

Las relaciones entre Hamilton y el ‘team manager’ de Mercedes F1, Toto Wolff, son excelentes, pero el futuro de este último también levanta especulaciones. Aunque el dirigente austríaco asegura lo contrario, algunos dicen que ocupará otras funciones en la empresa matriz Daimler, y Hamilton se mostraría reacio a comprometerse hasta que sepa si Wolff se mantiene al frente en la F1.

El británico tampoco esconde su interés por el medio ambiente y la necesidad de que el automovilismo sea más “verde”, una imagen que la F1 no transmite en absoluto.

Por eso creó un equipo para participar en el nuevo campeonato ‘Extreme E’ (de eléctrico) que se lanzará el próximo año con el objetivo de llamar la atención sobre los daños del calentamiento global.

– ¿Un año y más? –

Hamilton no participará como piloto, pero su presencia tiene como objetivo “despertar las consciencias y desarrollar innovaciones tecnológicas en el automovilismo”, apuntó en Portimao.

El retraso también podría obedecer simplemente a los trastornos provocados por la pandemia de coronavirus.

Wolff recordó, con un punto irónico, que quizás ahora no era el momento de encerrarse en una sala para hablar de un contrato cuando todo está dispuesto para aislar y proteger a los pilotos.

La pandemia también ha tenido un fuerte impacto en las finanzas de los grupos automotrices y Daimler podría ser reticente a aumentar los emolumentos del británico, estimados en 40 millones de dólares (casi 34 millones de euros) anuales.

Preguntado sobre la posibilidad de que, en este contexto, una solución pasaría por aplazar un año las negociaciones sobre un nuevo contrato de varias temporadas prolongando el actual solo hasta 2021, Hamilton no la descartó.

“Normalmente hablamos para duraciones de tres años. Pero el momento es diferente y ya podría preguntarme si quiero seguir todavía tres años”, confió, añadiendo sin embargo que le “interesan” los nuevos monoplazas prometidos para 2022.

Solo hay algo seguro: “Ustedes sabrán más en los próximos dos meses”, prometió.